F. M. A.
En una nueva avanzada, el Gobierno dictará otra resolución en la que obligará a Repsol YPF a bajar el precio del combustible de aviones, el JP1, que de acuerdo con Aerolíneas Argentinas está en un valor elevado.
La información fue proporcionada por fuentes oficiales, pero la decisión oficial se conocerá en unas semanas, ya que el expediente enviado por la empresa aún no llegó a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC).
El viernes, el presidente de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, denunció que el JP1, que se produce casi en su totalidad a nivel nacional, “con costos nacionales, es cobrado a precio internacional”.
Las fuentes indicaron que se hará un estudio minucioso para determinar cuál debería el valor del JP1 en la Argentina, en función de la estructura de costos que exhiba Repsol YPF. El tema aún no fue abordado en las reuniones que la firma mantuvo con el Gobierno, porque la prioridad la tenía la problemática del precio de venta del gasoil para el transporte automotor.
“Aerolíneas es la principal consumidora del JP1, con u$s500 millones al año; habría que hacer lo necesario para que pague un poco más barato”, apuntó Recalde el viernes, dando a entender que la decisión oficial es lograr este objetivo.
ENARSA. En forma conjunta, el ministro de Planificación, Julio De Vido, negó ayer que la empresa estatal Enarsa esté comercializando gasoil con sobreprecios a las empresas de transporte de pasajeros, y ratificó su denuncia contra las petroleras.
“Enarsa va a seguir proveyendo gasoil al precio que corresponde, y no puede hacerlo de otra manera porque no pacta precios de venta ni despacha en surtidor como sí hacen las otras compañías”, dijo De Vido en un comunicado de prensa.
“Clarín miente para defender los sobreprecios de las petroleras porque se identifica con sus prácticas abusivas”, afirmó el ministro de Planificación.
Aerolíneas Argentinas es el mayor consumidor del combustible JP1.
