La Presidenta intentó dar un gesto de renovación en un ministerio muy desgastado.
Randazzo, Cristina Kirchner, De Vido y Ramos, ayer, durante el anuncio de la reestructuración del área de Transporte. Foto: DyN Las encuestas en baja, la crispación social y las protestas por el dólar llevaron a Cristina Kirchner a oxigenar el gabinete. Pero sin producir profundos cambios de nombres. De todos modos, Julio De Vido fue el gran damnificado porque la poderosa Secretaría de Transportes pasará de su Ministerio de Planificación al de Interior, de Florencio Randazzo, que ganó un inesperado fortalecimiento.
También para cuidar la popularidad de su gobierno, la mandataria les propinó pequeños tirones de orejas en público al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, y al senador Aníbal Fernández, por sus posiciones sobre el dólar.
En diez días, De Vido sufrió recortes decisivos en su poder, según admiten a LA NACION fuentes oficiales. Desde hace tiempo, el ministro es centro de incesantes versiones sobre una retirada del Gobierno por voluntad propia. El 24 de mayo pasado, De Vido debió anunciar el fin de la concesión de TBA sobre la línea Sarmiento del ferrocarril. El propietario de TBA, Claudio Cirigliano, siempre tuvo fuertes lazos con el ministro. El lunes pasado Cirigliano fue detenido en la causa judicial de la tragedia de Once.
Tras esa secuencia, De Vido perdió ayer Transporte. Esa área desgastó la imagen del Gobierno y desató protestas de la gente.
Hace dos años, De Vido había perdido el control de Aerolíneas Argentinas a manos de La Cámpora. Hace dos meses, debió ceder YPF al camporista Axel Kicillof, viceministro de Economía. Sólo le quedó ahora a De Vido el manejo formal de la Secretaría de Energía. También controla el área de Comunicaciones y de Obras Públicas, en una economía que por la caída en la recaudación paraliza obras.
En su ministerio ayer no respondieron a LA NACION la pregunta sobre su pérdida de poder y su posible retiro.
Los amigos de De Vido aseguran que Cristina Kirchner lo relevó ayer de futuros problemas judiciales en Transporte. "Es una forma de protegerlo", dijo una fuente.
"Igual que con la energía, en el tema transporte De Vido estaba en inferioridad para argumentar tras nueve años de gestión. Le sacaron, en realidad, un área conflictiva", explicó un funcionario. ¿Premio o castigo?
Presionada por las encuestas, la jefa del Estado le dio una señal también a Mauricio Macri: otra gestión en transportes y un ente tripartito con Ciudad, Nación y provincia de Buenos Aires para una nueva etapa.
"La obra pública tendrá que reactivarse porque es un pilar del modelo, de algún lado la plata va a salir", aventuraban en la Casa Rosada.
El fortalecimiento de Randazzo, luego de peleas duras contra el vicepresidente Amado Boudou, desconcertó a muchos. Se interpretó como un premio a los logros en su recortada gestión: el DNI y el pasaporte, la Agencia de Seguridad Vial y la política electoral. Ahora, controlará 21.000 millones de pesos de subsidios, una ex caja de De Vido.
Como sea, Randazzo es un exponente del "ala moderada", que, al igual que De Vido, combate en silencio e internamente a Moreno en su política policial de control del dólar.
Esa política, que desató crispación social, no cambiará. Pero Cristina Kirchner buscó dar ayer señales para terminar con "la sensación de injusticia" cuando anunció la pesificación de su plazo fijo de 3 millones de dólares y pidió a sus ministros que la imitaran.
Fue otra respuesta a los cacerolazos surgidos luego de que Aníbal Fernández dijo: "Hago con mi plata lo que se me antoja", mientras Moreno ajustaba al máximo la prohibición de comprar dólares.
El poder menguante de De Vido
ANTES
Energía
Manejó desde 2003 toda la política energética del Gobierno. Fue impulsor del desembarco de los Eskenazi en YPF y luego fue interventor en la empresa estatizada.
Transporte
Fue el amo y señor de los subsidios multimillonarios para trenes, colectivos y subtes.
Obra pública
Uno de los pilares de la gestión kirchnerista, también estuvo a su cargo durante nueve años.
DESPUÉS
YPF, en otras manos
Su política energética fue indirectamente cuestionada al estatizar YPF. El nuevo directorio no lo incluye. Sí a Kicillof, que había sido el viceinterventor de De Vido.
Transporte, para Randazzo
La tragedia de Once puso bajo la lupa toda la política de transporte. Ayer quedó en manos de Interior.
Obras frenadas
Las partidas para infraestructura quedaron reducidas este año ante la sequía de fondos nacionales.
