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Todavía no están claras las causas de la tragedia
El avión era nuevo y el piloto tenía experiencia. En plena emergencia, habría intentado descender sobre el agua.
Carmelo. Enviado especial Guillermo Pellegrino uruguay@clarin.com
El avión era nuevo, el piloto experimentado, el viaje, corto. Pero algo salió mal. Todavía nadie sabe cuál fue el motivo del accidente aéreo que dejó cinco muertos a pocos kilómetros de Carmelo, en Uruguay, hundiendo en el dolor al Río de la Plata. Esa será una de las incógnitas que ahora deberá esclarecer la investigación judicial.
El aterrizaje de emergencia del Beechcraft Super King Air B200 ocurrió poco antes de las 14 en una zona de islotes, al norte de la isla Martín García. Una de las líneas de investigación que trascendió desde la Fuerza Aérea Uruguaya señalaba que el piloto pudo haber perdido el control de su nave al intentar remontar vuelo, arrepentido por la mala visibilidad.
Esa hipótesis apuntaba a que la situación climática podría haber llevado a Leandro Larriera a abortar el descenso. Pero, en esa suposición, una falla mecánica en algún sistema del avión pudo haber encendido la emergencia. Esa versión sería consistente con la declaración que hicieron en el hospital provincial Cordero de San Fernando dos sobrevivientes, Ignacio Llosa y Santiago Villamil, quienes aseguraron que se escuchó una explosión cuando bajaban.
El secretario de Seguridad, Sergio Berni, que coordinó las tareas de rescate, también aventuró una respuesta. “Todo indica que ha pegado con la trompa por como quedó la cola desprendida. La experiencia nos indica que seguramente haya tenido una falla en el motor y con el banco de niebla no pudo ver bien el río cuando quiso aterrizar”, explicó.
Pero anoche no existía una hipótesis concreta y los expertos en seguridad aeronáutica decían que un avión de esas características puede mantener vuelo aún con uno de sus motores averiados. Por eso, se especulaba con que la falla podría haber pasado por algún sistema eléctrico.
Horas antes, el vocero de la Armada uruguaya, Gastón Jaunsolo, había dicho que el piloto había encendido una señal de falla en el aparato segundos antes del accidente.
“Cuando cayeron llamaron por teléfono informando lo que sucedía y a partir de eso se inició el rescate”, confirmó.
No obstante, Jaunsolo evaluó que probablemente hubo una maniobra hecha con pericia por Larriera por cómo quedó “acuatizada” la aeronave. “Los pilotos se entrenan para posicionar y ubicar la aeronave y tratar de ocasionar poco daño a los pasajeros; son maniobras de mucha destreza para este tipo de operaciones”, explicó. w
Desde Argentina “La experiencia nos indica que quizás haya tenido una falla en el motor y con el banco de niebla no pudo ver bien el río” Sergio Berni secretario de seguridad
Desde Uruguay “Cuando cayeron llamaron por teléfono informando lo que sucedía y así se inició el operativo de rescate” Gastón Jaunsolo Vocero de la armada uruguaya
Antecedentes
10 de octubre de 1971 Ese día 9 bailarines del Teatro Colón (entre ellos los dos principales, José Neglia y Norma Fontenla) partieron en avioneta de aeroparque a Trelew. Momentos después, el piloto perdió el control y se estrelló en el Río de la Plata. No hubo sobrevivientes.
15 de enero de 2009 La pericia del piloto del vuelo 1549 de la aerolínea US Airways evitó una catástrofe en Nueva York, cuando logró acuatizar su avión sobre el río Hudson y salvó la vida de las 155 personas a bordo, después de que unas aves entraran en los motores de la nave y los paralizaran.
29 de julio de 2010 Un helicóptero que se dirigía al aeropuerto de San Fernando desde la ciudad de Montevideo se precipitó de golpe al Río de la Plata.
Como consecuencia del accidente, el piloto -un prestigioso jurista y asesor del presidente uruguayo, José Mujica- murió en el acto.
Pero el copiloto, de milagro, logró sobrevivir a la caída y alcanzar la costa a nado. Llegó hasta las playas de una estancia, donde los mismos peones lo socorrieron y lo trasladaron para que fuera atendido.
