Multa
El viernes pasado llegué quince minutos tarde para hacer el check-in de mi vuelo de Aerolíneas Argentinas de Santiago de Chile a Buenos Aires. Disgustado, pero sin chistar, pagué los 84 dólares de multa para poder tomar el siguiente vuelo, que partía en una hora y media, pero que nunca existió. Después de cinco horas de espera en el aeropuerto, el vuelo fue cancelado y terminé viajando al día siguiente en un vuelo de otra compañía. En síntesis: el vehículo que me llevó al aeropuerto tuvo un problema y llegué quince minutos tarde al check-in, lo que me costó 84 dólares de multa. El vuelo al que fui transferido tuvo un problema y nunca llegó a Chile, retrasando mi regreso 24 horas, lo que le costó a Aerolíneas Argentinas... nada.
Espero que las cosas sean más justas en Defensa del Consumidor, adonde pienso acudir.
Juan Maurette