No sólo lo piden las centrales gremiales opositoras. Desde el gobierno advirtieron que no responderán a esta demanda de manera generalizada.
Los pedidos del sindicalismo de un bono de fin de año parecen complicar los últimos meses de 2014 en materia laboral. Si hubiera sido sólo un pedido de las centrales obreras opositoras, la iniciativa podría haberse interpretado como un reclamo más en la línea de los que se vinieron realizando durante el año, pero lo sorprendente fue que se sumaran los sindicalistas oficialistas Antonio Caló y Hugo Yasky y que fueran los principales impulsores de una suma que compense la pérdida de poder adquisitivo que generó la inflación en los salarios de los argentinos.
Desde el gobierno ya advirtieron que no responderán a esta demanda de manera generalizada. A este tema se refirieron tanto el jefe de Gabinete Jorge Capitanich como el secretario de Comercio Augusto Costa. Ambos coincidieron en que, con las paritarias acordadas en la primera mitad del año y con la desaceleración del IPCNU en los últimos meses, hubo recuperación y no un deterioro del poder de compra del salario. Es por eso que los dos opinaron que el pedido de plus "no está justificado".
Desde el Ministerio de Trabajo, además, agregaron que la política salarial general es la que se establece en el marco de las paritarias anuales y del Consejo del Salario Mínimo. "La política salarial de las empresa es algo convenido entre las partes", aclararon desde Alem 650, lo que deja en claro que no habrá ninguna medida generalizada para los trabajadores y que si hay bonos de fin de año serán acuerdos privados en los que nada tendrá que ver el ministerio.
Sin embargo, hay algunas administraciones provinciales y municipales que están anunciando que otorgarán un plus de fin de año para sus empleados.
La insistencia de los sindicalistas a pedir un bono de fin de año especialmente la proveniente de los sindicalistas oficialistas tiene relación con la negativa del gobierno a dar respuesta positiva al reclamo por la modificación del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias que hicieron durante todo el año todas las centrales obreras. Todos los sindicalistas especialmente los oficialistas, una vez más están muy sensibles por no haber obtenido respuesta respecto de Ganancias. Muchos, incluso se sienten dolidos. No entienden por qué al menos no enviaron al Congreso un proyecto de ley que contemplara los lineamientos del documento entregado a Capitanich en la última reunión en la que el gobierno recibió a la cúpula de la CGT oficialista.
A pesar de las negativas gubernamentales de subir el mínimo no imponible, de eximir del pago de Ganancias al primer medio aguinaldo y de mandar un proyecto de ley al Congreso para modificar el tributo, los sindicalistas no pierden las esperanzas de que de un momento a otro se anuncie que el segundo medio aguinaldo del año sí quedará eximido de pagar el impuesto.
CINCUENTA IDEAS
Anoche comenzó el Coloquio Anual de Idea en la ciudad de Mar del Plata y como todos los años, allí se reúne la alcurnia empresaria de la Argentina. En este 50° aniversario de los encuentros, habrá un clima preelectoral en el que los principales aspirantes a la presidencia en 2015 se mostrarán con sus economistas de confianza por los coquetos pasillos del Hotel Sheraton, se codearán con empresarios y ofrecerán notas a la nutrida concurrencia periodística. Pero al mismo tiempo, hombres de empresa y lobbistas no perderán la oportunidad de compartir un café o una copa con Daniel Scioli, Mauricio Macri, Sergio Massa, Ernesto Sanz, Hermes Binner y Julio Cobos para conocerlos más. Fue tanta la expectativa por estos posibles encuentros que quedó superado el cupo de 800 empresarios y más de 40 de ellos quedaron en lista de espera.
Es esperable que, como en la última década, los kirchneristas más duros no concurran al encuentro, aunque las decisiones de la administración de Cristina Fernández en materia política y económica estarán presentes, sin duda, en las conversaciones de pasillo.
Pero entre panel y panel, los empresarios también aprovecharán para discutir sobre algunas cuestiones relacionadas con el mundo laboral que los preocupan: el reclamo de bono de fin de año que ya están formalizando varios sindicatos en algunas empresas y esa suerte de veraz laboral para empresarios que no cumplan con la legislación laboral. De hecho, la UIA llega al coloquio, justamente, con la idea de buscar adhesiones a lo que convino el martes en la reunión de junta directiva en la que se acordó pedirle al gobierno que modifique el Registro Público de Empleadores con Sanciones Laborales (REPSAL).
Según fuentes del Ministerio de Trabajo, aún no hay empresarios "escrachados" en este registro. Ocurre que sólo aparecen quienes tienen sanción firme, quienes no hayan pagado su sanción o quienes deban permanecer por cuestiones de tiempo, tal como lo establece la ley. Pero esta nueva reglamentación comenzó a regir el 9 de septiembre pasado, es decir que para figurar en el REPSAL, los empresarios deberían haber incumplido alguna ley laboral después de esa fecha y es materialmente imposible que ya hayan pasado todas las instancias necesarias que llevan a figurar en el listado. Este interregno hasta que comiencen a aparecer los infractores es el que probablemente quieran aprovechar en la UIA para conseguir modificaciones al sistema, que fue férreamente resistido desde que comenzó a debatirse la medida.
Como en los últimos años, el coloquio también será escenario para que se paseen algunas personalidades del sindicalismo argentino como el líder de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, que concurrirá (también como otros años) acompañado del titular del sindicato de peones rurales Gerónimo Venegas.
NACIONALES Y POPULARES
En paralelo con este tradicional evento empresario, un grupo de dirigentes kirchneristas encabezado por Alejando Vanoli y Sergio Urribarri organizan hoy a las 14:30, en el teatro Melany, de la mismísima ciudad feliz, un encuentro llamado "Convocatoria por las Ideas nacionales y populares. Confrontando ideas". Si bien quieren evitar aparecer como un "contracoloquio", la fecha, el lugar y el nombre elegidos para el evento no se presta a muchas dudas. La convocatoria se hace pensando en "resumir el pensamiento de aquellos a quienes los medios concentrados silencian o tergiversan", también buscan desterrar la idea del "fin de ciclo" kirchnerista.
A este encuentro concurrirán además algunos sindicalistas, especialmente aquellos más afines ideológicamente con el gobierno nacional pero que al mismo tiempo están cuestionando por estos días los intentos reunificadores de la CGT Azopardo y un grupo de sindicalistas conocidos como los "independientes" pero que formalmente pertenecen a la CGT del metalúrgico Antonio Caló.
El sindicalismo insiste en pedir un plus de fin de año, espera algún guiño por Ganancias y piensa en la reunificación. Mientras, la campaña electoral se va abriendo camino en los espacios que encuentra: el mundo empresario y el del movimiento obrero son claros ejemplos.
