Maturano defendió al maquinista Córdoba.
Cuatro días después de la tragedia ferroviaria de Once, el titular del gremio de los conductores de trenes La Fraternidad, Omar Maturano, defendió al maquinista Marcos Córdoba y reiteró duras críticas a la empresa TBA, concesionaria del servicio del ferrocarril Sarmiento, en el que el miércoles último murieron 51 personas.
"Si hacemos un poco de historia, todos los compañeros que se jubilan con 30 años de servicio tienen 25 o 30 muertos en su haber en lo que se refiere a arrollamientos en pasos a nivel y no por su negligencia", afirmó Maturano en declaraciones radiales. De ese modo relativizó la responsabilidad de Córdoba, a quien calificó de "la víctima número 52", y afirmó que quedará "muerto en vida" por las secuelas del accidente fatal en la estación Once.
Según la agencia de noticias DyN, Maturana afirmó que Córdoba tomó el reemplazo de un conductor que no podía seguir en la estación Castelar y que entonces llevaba una demora de nueve minutos. Recordó que el tren anterior ya había sido cancelado y que debió convertir un viaje semirrápido en uno en que debía parar en todas las estaciones.
"Cuando llegaba a Once llevaba una demora de 20 minutos", expresó, y señaló que entonces sintió la presión de los pasajeros, que debieron soportar la cancelación primero y la demora del segundo. "El compañero hizo las aplicaciones de servicio que debía hacer al entrar en la plataforma", y comentó que para frenar en un espacio de 200 metros podía ingresar a 25 kilómetros por hora, como efectivamente hizo. El dirigente gremial, sin embargo, negó que Córdoba hubiera declarado que recibió la orden de seguir adelante a pesar de sus advertencias. "Sólo dijo que se quedó sin frenos y después habló de cosas técnicas, de todos los días", afirmó.
Maturano restó importancia a las presiones que pueden ejercerse desde la empresa, porque dijo "el conductor puede negarse a salir con el tren" y puso énfasis en que en realidad los maquinistas registran mayor presión de los pasajeros "La presión es del público. Cuando nosotros estamos detenidos en una señal (de advertencia), los pasajeros empiezan a bajarse y maltratarnos", acotó.
El gremialista sostuvo que cuando los conductores reciben un tren con frenos que no están totalmente en condiciones "nos tomamos precauciones, como ir a menos velocidad y frenar antes". "Córdoba es la víctima 52. Cuando se enteró ante el juez de que había tantas víctimas se largó en un llanto y demoró por eso la declaración. Para nosotros ese compañero va a quedar muerto en vida", dijo Maturano.
Ayer, la empresa volvió a negar que el accidente, que causó 51 muertos y más de 700 heridos, se haya producido por una falla mecánica. "La formación cumplió el trayecto sin que se verifiquen o comuniquen anomalías hasta su impacto en la estación de Once", sostuvo en un comunicado TBA, la concesionaria de la línea Sarmiento, hoy cuestionada desde la Casa Rosada.
