Los maestros, enojados con la Presidenta y los legisladores.
Hubo dos factores políticos que influyeron en el altísimo acatamiento al paro docente: el notorio aumento en las dietas de los legisladores nacionales y el tramo del discurso que la presidenta Cristina Kirchner ofreció durante la Asamblea Legislativa, en el que descalificó a los docentes al decir que trabajan cuatro horas y tienen tres meses de vacaciones. Así lo dijeron ayer a LA NACIÓN la mayoría de los docentes consultados; incluso hubo quienes no se plegaron a la medida de fuerza y también reprobaron las palabras de la Presidenta.
Mauricio, profesor de música, explicó por qué no se adhirió: "No puedo arriesgarme a perder el laburo. Por eso no hice paro, pero estoy de acuerdo", dijo, y añadió: "Creo que se plegó más gente por los ataques de Cristina. Fue muy agresiva".
Lo mismo opinó Inés, profesora de inglés, que trabaja en una escuela pública y en otra privada. "En el público me plegué. En el privado, no, porque me echan. Hay muchos profesores que no suelen adherirse a los paros porque no están de acuerdo con ese modo de reclamo y esta vez lo hicieron por las agresiones de la Presidenta. Yo creo que es un paro bastante político, una respuesta a lo que pasó en Diputados y a esa frase de la Presidenta".
La docente añadió: "Son pocos los que pueden vivir con un cargo simple, y tampoco es tan fácil conseguir dos cargos". Otra maestra, Mariana, coincidió. "Eso de que trabajamos cuatro horas? necesitamos más de un cargo. Además, también trabajamos en casa, corrigiendo a los chicos". Si bien Mariana está de acuerdo con la medida de fuerza, no se plegó. "En mi escuela no puedo plegarme, pero hay otros privados que no tienen problemas. Hubo muchos docentes en colegios católicos que se adhirieron. También hubo padres que no mandaron a sus hijos a la escuela", dijo Mariana.
En Capital
En las escuelas públicas de la Capital Federal hubo maestros que acataron el paro, pero no fueron mayoría. Uno de los aspectos que influyeron fue el comienzo del secundario, y los docentes quisieron estar ahí. Pero la palabra que se escuchó de manera casi unánime fue "bronca".
Ana, maestra de quinto grado de la Escuela N° 6 French y Beruti, señaló que el que está en discusión es un tema complejo: que por un lado, los chicos no aprenden si no hay clases, pero que también hay que tener en cuenta que les están "faltando el respeto a los maestros" con el sueldo que se les paga y con lo que se dice en los discursos. "Yo entré a las 8 a trabajar y me estoy yendo ahora -dijo mientras salía de la escuela situada en la zona de Retiro, minutos después de las 16-. A veces cuando se habla se generaliza: hay maestros buenos y malos, pero muchos maestros se matan trabajando. Además, el maestro también trabaja en casa: tiene que hacer las fotocopias, planificar las clases, preparar láminas", explicó.
En esa escuela primaria sólo fueron tres los maestros que se ausentaron por el paro. A dos cuadras de ahí, en la escuela técnica número 12, sobre avenida del Libertador, hubo clases normalmente, aunque admitieron que si ayer no hubiese sido el primer día de clases para los chicos de segundo a quinto año, y el paro se hubiese realizado la semana que viene, la situación habría sido diferente.
Una autoridad de un colegio público de enseñanza media de Palermo dijo que a la espera por los aumentos de sueldo se sumó la preocupación por el cierre de divisiones. "Lo que da más bronca es el aumento de los legisladores. Creo que después de eso se disparó todo. Y lo de los tres meses de vacaciones aclaro que no es así: acá terminamos de trabajar el último día hábil de diciembre y el 13 de febrero se volvió al trabajo", sostuvo la docente.
Como era de esperarse, en los colegios privados de la Capital que recorrió LA NACIÓN las clases en su mayoría se dieron normalmente.
Dichos y hechos
Postura irreductible en San Juan
"No podemos superar lo que ofrece la Nación", afirmó ayer el gobernador de San Juan, José Luis Gioja, al referirse a la propuesta salarial que hoy les hará la ministra de Educación, Cristina Díaz, a los docentes. El mandatario anticipó así que respetará el decreto presidencial por el cual se fijó el sueldo básico inicial del maestro en $ 2800.
La Coalición Cívica se ofrece de mediadora
Para tratar de resolver el conflicto docente bonaerense, que hoy cumplirá un día de paro, los diputados provinciales de la Coalición Cívica Walter Martello y Oscar Negrelli propusieron ayer que la Comisión de Educación de la Legislatura se convierta en mediadora entre los sindicatos de maestros y las autoridades de la gestión de Daniel Scioli.
"Sintonía fina" en la universidad
La Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu), por medio de su secretario general, Carlos De feo, planteó ayer la necesidad de "debatir una reforma estructural del sistema", que incluya una "nueva ley de educación superior". "Sintonía fina en la universidad significa afrontar de una vez por todas las asignaturas pendientes", sostuvo.
