La presidenta Cristina Kirchner arremetió duramente contra un periodista de Clarín, al que tildó de "nazi", y contra otro de LA NACION, al que llamó antisemita, por sus notas publicadas ayer.
Sin nombrarlo directamente, la Presidenta calificó de "nazi" a Osvaldo Pepe, secretario de Redacción de Clarín, que ayer escribió un artículo titulado "Los «imberbes» de Aerolíneas". Sobre esta nota, Cristina Kirchner dijo: "Me pareció muy nazi". La columna mencionaba que los jóvenes de La Cámpora, "sentados en pilas de dineros públicos, como en Aerolíneas, ejercen sus modernas militancias de escritorio".
Y añadía: "Muchos de ellos son hijos o familiares de militantes montoneros. Los identifica el mismo gen que a sus padres". Sobre este párrafo, la Presidenta afirmó: "Me sonó a [Josef] Menguele. Esto de creer en la identificación genética. Qué es esto que alguien nace predeterminado; me pareció muy nazi".
En otro pasaje de su discurso durante un acto en el Museo del Bicentenario de la Casa de Gobierno, cuestionó -sin nombrarlo- a Carlos Pagni, de LA NACION, por su nota "Axel Kicillof, el marxista que desplazó a Boudou". Cristina Kirchner les preguntó a los presentes: "¿Está por ahí el marxista Axel Kicillof?".
Hubo sonrisas y aplausos. Después criticó el artículo, que sostenía que Kicillof es bisnieto de un legendario rabino. "Tenía cierto tufillo antisemita -dijo la Presidenta-. La verdad, no les pregunto a mis funcionarios cuáles son sus orientaciones políticas". Y lanzó contra los medios: "En otra época darían miedo; ahora dan pena".
