Para Piumato, elegir al titular de la UOM como sucesor de Moyano sería "jugar con la reserva". Advirtió que es necesario ratificar al camionero para frenar al Gobierno.
A medida que se profundiza su enfrentamiento con el Gobierno y en el contexto de reuniones e intercambios entre diversos sectores sindicales de cara a la elección de la nueva conducción de la CGT, el moyanismo salió ayer con los tapones de punta a impugnar la posibilidad de un desembarco del jefe de la UOM, Antonio Caló, en el máximo sillón sindical, al advertir que ese liderazgo no puede ser definido por la presidenta Cristina Fernández.
"El movimiento obrero no puede elegir al candidato que le guste al Gobierno, no es la CGT del Gobierno, es la CGT de los trabajadores", enfatizó el dirigente de los judiciales y hombre de confianza de Hugo Moyano, Julio Piumato, en una referencia directa a la posible postulación de Caló. Piumato se diferenció así de los dichos de otro importante dirigente de la central obrera, el titular del sindicato de peones de taxis, Omar Viviani, quien el miércoles expresó públicamente su voluntad de apoyar la candidatura del dirigente metalúrgico.
"Nosotros la tenemos clara: entre Caló y Moyano, votamos a Moyano, es el que mejor defiende a las trabajadores", remarcó el judicial. Y argumentó: "Más ahora que hay algunas cosas que no cierran, no vamos a jugar con la reserva, tenemos que poner a los mejores hombres".
La intención del moyanismo de desautorizar la eventual postulación de Caló para suceder al camionero en el máximo sillón de la entidad se produjo luego de que el titular de la UOM sumó en las últimas semanas el respaldo de importantes hombres del Gobierno y de los gremios más fuertes dentro de la estructura cegetista. Tras las fotos de sus encuentros públicos con los ministros Julio de Vido, Débora Giorgi y Carlos Tomada, el metalúrgico se reunió en privado con Viviani y los referentes del llamado grupo de "independientes" (Andrés Rodríguez de Upcn, Gerardo Martínez de la Uocra y José Luis Lingeri de Obras Sanitarias), quienes se mostraron dispuestos a respaldar su candidatura en el marco de un armado de consenso entre los diversos sectores de la entidad. Con ese mismo propósito, Caló también prevé un encuentro con el grupo de los "gordos", donde reportan Armando Cavalieri, Oscar Lescano, Carlos West Ocampo y Héctor Daer.
La mayoría de esos dirigentes estará esta tarde en el acto en el que Ricardo Pignanelli asumirá formalmente la conducción del sindicato de Smata, una cita que podría servir para avanzar en las conversaciones con vistas al futuro de la central. Moyano ya anticipó que no participará del encuentro (viajará a Mendoza para asistir al plenario de cúpula de la CGT provincial) y tampoco prevé concurrir el sábado a Parque Norte al festejo de cumpleaños del gastronómico Luis Barrionuevo, al que fue especialmente invitado.
Sin embargo, desde el entorno del camionero admitieron que en las últimas semanas se comenzó a gestar un acercamiento con el barrionuevismo, con el objetivo de unir voluntades de cara al congreso de julio que debe elegir las nuevas autoridades de la central obrera. En esa estrategia, el moyanismo también aspira a cerrar una alianza con el titular del gremio de peones rurales, Gerónimo Venegas.
La idea de una alianza con Barrionuevo y Venegas responde al convencimiento de Moyano sobre la necesidad de profundizar su perfil confrontativo en la relación con la gestión de Cristina, para lo cual también evalúa la alternativa de definir una medida de fuerza de carácter nacional ante la falta de respuestas oficiales a sus demandas.
