Día de la Armada
El ministro, que es investigado por la Justicia, denunció "intereses que vilipendian" a la institución castrense e hizo una reivindicación de la política de defensa
Por Valeria Musse | LA NACION
LA PLATA.- Rodeado por autoridades castrenses, que conmemoraban un nuevo aniversario del Día de la Armada, el ministro de Defensa nacional, Arturo Puricelli , acusó a los medios de comunicación "que en medio de viles intereses vilipendian a nuestra institución", en referencia las supuestas irregularidades denunciadas en la licitación de la campaña antártica.
El funcionario evitó referirse a la causa judicial que lo puso en el ojo de la tormenta y lo investiga, por poner en riesgo el abastecimiento de las bases en el continente blanco, a raíz de los problemas que tuvieron el barco y el helicóptero contratados por el área de Defensa, pese a pagar por anticipado US$ 15,8 millones a la empresa propietaria del buque holandés Timca.
Luego de que el jefe del Estado Mayor General de la Armada, almirante Daniel Alberto Martin, convocara a retemplar el espíritu y garantizar la presencia de la marina en el mar, por el 199° aniversario del Combate Naval de Montevideo -hecho por el cual se instituyó el Día de la Armada-, Puricelli omitió los graves problemas que frustraron la campaña antártica, destacó el "futuro venturoso de las Fuerzas Armadas" y denunció que "no son pocas las contingencias que enfrentamos".
Al criticar a los medios de comunicación, el ministro agradeció a "todas las Fuerzas Armadas que no se hicieron eco de las convocatorias explícitas por importantes medios para que asuman actitudes de rebeldías contrarias a la disciplina militar por la que están formados". Enseguida alzó la voz y prosiguió: "Puedo decir con la frente alta que hemos tomado las mejores y más transparentes decisiones en el cumplimiento de la misión".
El ministro y otros funcionarios del Ministerio de Defensa son investigados por el magistrado federal Luis Rodríguez por presuntas irregularidades en las licitaciones que ganó la compañía Transport&Service para proveer la embarcación Timca y helicópteros, medios de transporte que no pudieron completar el abastecimiento en las bases antárticas argentinas.
Más críticas a los medios
Ante más de 300 uniformados, en la Escuela Naval Militar de Río Santiago, en Ensenada, convocó a "no sesgar en el cumplimiento del deber, como quieren algunos medios de comunicación". Reivindicó, además, la política del Gobierno para "fortalecer los lazos de cooperación con los países de la región".
No fue todo. Puricelli les pidió que "no se crean lo que les dicen algunos medios, no hemos perdido más capacidades" y se refirió al problema que tuvo la Fragata Libertad, el buque escuela que estuvo retenido en Ghana unos 77 días. "No era verdad que íbamos a entregar la Fragata Libertad, que hoy está en este dique del Astillero Río Santiago, dispuesta a terminar su mantenimiento para emprender un nuevo viaje de estudios", arengó.
Puricelli repitió que se encuentran trabajando para modernizar "uno de los más importantes rompehielos como es el Irizar [que quedó inutilizado desde 2007 cuando se incendió]", así como reconoció que "estamos en el camino de recuperación de nuestras capacidades militares".
En la edición del jueves, LA NACION reveló que el gobierno de Cristina Kirchner, ante la emergencia por el fracaso de la campaña antártica, debió emplear un avión Hércules de la fuerza uruguaya, ya que las propias aeronaves de la Armada no estaban en condiciones, para completar el abastecimiento de las bases en la Antártida.
"Recibimos con alegría que la Armada uruguaya nos enviara a tiempo un Hércules C130, frente a la necesidad de tener que contar con un repuesto en tiempo limitado para culminar nuestra campaña antártica", precisó Puricelli.
El hecho de que el ministro relatara esta anécdota provocó cierto disgusto entre algunos oficiales retirados que, según dijeron a LA NACION, no entendían cómo la Argentina no contaba con aviones propios. Al finalizar la ceremonia, Puricelli se retiró sin dar entrevistas.
