Nota - Política - Pag. 6
Por Mariano Obarrio | LA NACION
Twitter: @marianoobarrio
La severa derrota electoral de anteayer volvió a profundizar ayer las discrepancias dentro del gobierno de Cristina Kirchner y de sus aliados. La Presidenta ordenó mostrarse triunfantes y negar el fracaso en las elecciones legislativas y su posible impacto en 2015, pero el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, se convirtió en el abanderado de quienes reconocieron la derrota y presionan por apurar cambios de políticas y de ministros.
Así nacieron dos nuevas "alas" en la Casa Rosada: la "negacionista", que secundaron el vicepresidente en ejercicio de la presidencia, Amado Boudou, y el secretario general, Oscar Parrilli, que celebraron alegremente de manera impostada un triunfo que no ocurrió. Y el sector "moderado", que integra, entre otros, el ministro del Interior, Florencio Randazzo. Estos dos sectores entraron en tensión por la divergencia en la lectura de la derrota y, sobre todo, por el camino a tomar a partir de ahora. Entre las cuestiones en danza se encuentran algunas medidas económicas, como un ajuste moderado en los subsidios, la remoción del cepo cambiario y medidas contra la inflación.
El ala "negacionista" de la derrota, encabezada por Parrilli y Boudou, se integra con Jorge Capitanich, Sergio Urribarri, Agustín Rossi, Carlos Heller, Carlos Kunkel, Mercedes Marcó del Pont y Juliana Di Tullio, entre otros. En tanto, el sector que habla de escuchar las urnas lo encabezan Scioli y Randazzo, junto con Insaurralde, Daniel Filmus, Aníbal Fernández, Julio Alak, Julián Domínguez y varios gobernadores que perdieron votos.
En medio de estas peleas, el secretario legal y técnico, Carlos Zannini, que no creyó los motivos para festejar, comenzó a imaginar a Capitanich como posible ministro de Economía en lugar de Hernán Lorenzino. Además, viene presionando por el ingreso de Urribarri como jefe de Gabinete, en reemplazo de Juan Manuel Abal Medina.
Capitanich y Urribarri fueron dos gobernadores del FPV ganadores el domingo último. LA NACION pudo saber que a Capitanich también lo promueve el viceministro de Economía, Axel Kicillof. En las últimas semanas tuvieron largas reuniones: son amigos y discuten de teoría económica.
Desde el gabinete, Urribarri y Capitanich podrían ser instalados nacionalmente para la pelea presidencial de 2015, según imaginan Zannini y Kicillof. Luego los medirían, y así el cristinismo podría designar un candidato propio para competir contra Scioli, hoy golpeado por la derrota de Martín Insaurralde en Buenos Aires. "Capitanich responde a Zannini, a Kicillof y a Cristina", confirmó una fuente oficial a LA NACION.
Pero desde el ala "moderada", que impulsa a Scioli para 2015, alientan a Diego Bossio, director de la Anses, para Economía. Y quieren dejar a Abal Medina en su cargo actual. La pulseada está abierta: Capitanich bloquearía a Bossio, de fuerte llegada a la Presidenta, que también tiene aspiraciones políticas, y es apoyado por Boudou, Lorenzino, Abal Medina y varios gobernadores, incluido Scioli. También asoma con aspiraciones presidenciales el titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, a quien algunos también barajaron para reemplazar a Abal Medina. Sería la contracara moderada de la alternativa de Urribarri.
Además se evalúa la salida del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, hacia un cargo de menor exposición.
Cualquier anuncio se hará cuando la Presidenta reasuma sus funciones luego del obligado reposo médico por su operación de un hematoma intracraneal. Sin embargo, ya está dando directivas desde Olivos, como se informa por separado.
Capitanich le dijo a un miembro del ala "moderada" que "el Gobierno salió fortalecido" de los comicios. Ahí se terminó la conversación.
Abal Medina y Zannini admitían en su fuero íntimo la dureza política de la derrota, pero debieron cumplir las órdenes de Olivos. El jefe del Gabinete insistió ayer en que "contra lo que algunos deseaban, obtuvimos la mayoría en ambas cámaras".
Sin mirar el costado negativo, Capitanich señaló ayer: "Me imagino una frondosa discusión en el FPV por las candidaturas para 2015"
