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El mercado operó con la noticia del nombramiento del nuevo ministro, pero cerró antes de la renuncia de Moreno.
Marcela Pagano mpagano@clarin.com Los mercados financieros reaccionaron con desconfianza ante los cambios de Gabinete. Es cierto que operaron sabiendo el nombramiento de Axel Kicillof pero cerraron antes de que se supiera que Guillermo Moreno abandona su cargo. Así, los rumores de un inminente desdoblamiento cambiario, medida que desde 2011 intentó impulsar el ahora ministro Kicillof, sumaron más presión al dólar. Pero también se desplomaron las acciones y los bonos. Los importadores apuraron sus compras y el tipo de cambio oficial, que fija el Gobierno, saltó cuatro centavos hasta tocar los $ 6,045 pese a que el BCRA vendió US$ 110 millones.
El billete paralelo también se disparó y tras tocar un máximo de $ 10,04 al mediodía terminó en $ 9,93. Los cueveros anoche festejaban la renuncia de Moreno, y ya se preparan para operar un blue más alto en los próximos días. Los bonos se desplomaron hasta el 4% y el Merval registró su peor caída diaria en dos años: -6,6%.
En el microcentro primaba la convicción de que un desdoblamiento es lo que se viene en po- lítica cambiaria. En las mesas de dinero se descarta que se impondrá un tipo de cambio turista con un valor más cercano al blue que al que hoy exhiben las pantallas de los bancos y casas de cambio. “Pero no será fácil determinar el valor, porque el Gobierno no puede tomar como referencia un mercado que es ilegal y al que ellos mismos le restaron importancia. Pero tampoco sirve hacer un cálculo del tipo de cambio de equilibrio, porque ese valor da $7,20 y con ese precio en una semana se vacían las reservas”, dijeron en un banco privado.
Los analistas coinciden en que la única pérdida de dólares que se puede evitar hoy es la que f luye mediante las compras con tarjetas en el exterior y mediante sitios de Internet extranjeros. Bajo estos conceptos el Banco Central perdería este año US$ 8.000 millones.
Un dólar caro y restringido sería la única salida, según los economistas de la city para frenar la sangría de reservas que ayer quedaron al borde de perforar los US$ 32.000 millones (ver recuadro).
Entre los banqueros se respiraba tranquilidad por la designación de un hombre del sector como Juan Carlos Fábrega al frente de la autoridad monetaria. No obstante, en la Bolsa porteña temen la avanzada de Kicillof sobre las empresas.
Ese temor se reflejó en la fuerte caída del Merval, que ayer se desplomó un 6,6%, su mayor baja desde el 3 de octubre de 2011 cuando un posible default de Grecia hundió a los mercados del mundo. Los bonos tampoco evadieron la baja.
Perdieron hasta 5,2%.
Es que la sensación de los inversores es que “redoblar la apuesta” no es la mejor fórmula para encarar esta crisis. w
La mirada del mercado
El miedo a más controles Los inversores reaccionaron a la luz de lo que se conoce del ahora ministro Axel Kicillof. Que le gusta meterse en las empresas y hasta le gustaría limitar las utilidades.
El interrogante del dólar No hay certeza sobre el mercado cambiario. Ayer el bajón de los precios, sobre todo de los títulos públicos, fue parte por la desconfianza y parte porque el Contado con liqui se negoció debajo de los 9 pesos.
¿Y Moreno? Con la renuncia de Moreno, vuelven a abrirse los interrogantes en el mercado. ¿Habrá recuperación o se esperarán señales más concretas del nuevo ministro?
Las reservas volvieron a caer
Las reservas del Banco Central cayeron ayer en US$ 193 millones y quedaron en US$ 32.071 millones.
La autoridad monetaria, que hoy estrenará nuevo presidente, vendió US$ 110 millones para evitar que el dólar se disparara (igualmente subió cuatro centavos, cuando la suba promedio no superaba hasta ayer el centavo).
Uno de los principales desafíos que enfrenta Juan Carlos Fábrega al frente de la entidad será contener la sangría de reservas. En lo que va del año, el BCRA perdió más de US$ 10.000 millones.
Según sostienen en los bancos, si no se toman medidas cambiarias de manera inmediata esa pérdida podría ascender a US$ 14.000 millones hacia fin de año.
La caída en las reservas de ayer no sólo se debió a la venta en el mercado, si no también a un nuevo pago por importación de energía. Se estima que el déficit energético superaría este año los US$ 6.000 millones.
Desde que Cristina asumió la segunda presidencia, las reservas del Central no dejaron de caer. De hecho a principios de 2011 había alcanzado un pico de US$ 52.654.
En dos años se perdieron así US$ 20.300 millones de dólares. El viernes pasado Mercedes Marcó del Pont, justificó la caída en el pago de deuda pública.
La cifra
81,8% Es lo que suben, según el promedio del índice Merval, las acciones líderes en lo que va del año. Le están ganando al dólar blue, que subió un 49%
Martes negro. En la Bolsa no cayeron bien las designaciones, sobre todo la de Axel Kicillof.
