"Sé que no hay ningún delito fiscal", sostuvo el empresario español Gerardo Díaz Ferrán, encarcelado por vaciamiento del Grupo Marsans
El ex dueño de Aerolíneas Argentinas, Gerardo Díaz Ferrán, sostuvo que "nunca" le comunicaron que debía pagar impuestos por la compra de la compañía aérea.
"Sé que no hay ningún delito fiscal ni lo ha habido nunca", declaró convencido este miércoles sentado por primera vez en el banquillo de los acusados.
Díaz Ferrán se enfrenta a una pena de dos años y cuatro meses de cárcel por la compra de la firma argentina y a una indemnización de 99,04 millones de euros por el impago del Impuesto de Sociedades derivado de la operación.
El fiscal Miguel Ángel Carballo considera que Díaz Ferrán, el ex presidente de Aerolíneas Argentinas, Antonio Mata, y su socio, el fallecido Gonzalo Pascual, debían pagar impuestos por los derechos de créditos obtenidos por valor de u$s272 millones que la Sociedad Estatal de Participaciones Preferentes (SEPI) otorgó a Air Comet para saldar las deudas que acumulaba la firma argentina.
El ex dueño del Grupo Marsans reapareció esposado en la Audiencia Nacional, visiblemente más delgado, vestido con camisa y chaqueta de color azul y portando una pulsera con la bandera de España.
Así se mostró tras ser conducido desde la cárcel de Soto del Real, donde se encuentra desde el 5 de diciembre por el vaciamiento del conglomerado turístico.
El empresario admitió que participó, en nombre de Transporte de Cercanías, en la firma del contrato de compraventa "como garante de su cumplimiento", pero negó que la firma del contrato sea suya al consistir en "un borrón irreconocible", según consignó la agencia Europa Press.
"Ningún acreedor puso de manifiesto que existiera alguna contingencia para Air Comet.
He actuado convencido de que no hay que tributar al Estado español por esta operación", remarcó.
"Si hubiéramos creído que había que pagar algo, le habríamos pedido a la SEPI que lo aportara porque ustedes son prácticamente lo mismo", manifestó sobre la agencia estatal, para luego añadir que no podía acceder a la cuenta en la que SEPI ingresó los u$s300 millones .
"Con el dinero de esa cuenta se pagó a todos los acreedores, supongo que esos pagos se hicieron en la sede de la SEPI con cheques al portador", desveló Díaz Ferrán.
A continuación, subrayó que Interinvest fue la única beneficiaria de los aportes irrevocables y los créditos dirigidos a sanear las cuentas de Aerolíneas.
Díaz Ferrán está imputado en varias causas abiertas en la Audiencia Nacional. Entre ellas, por apropiarse indebidamente de 4,4 millones de euros en la quiebra del Grupo Marsans y por simular la venta de sus empresas para eludir el pago a sus acreedores, además de por vender preferentes como miembro del Consejo de Administración.
A su vez, el Juzgado de Instrucción número 36 de Madrid mantiene abierta otra causa en su contra por su participación en la quiebra de Seguros Mercurio , mientras que otro juzgado madrileño le consideró culpable de la bancarrota de Marsans.
