Córdoba - Nota - Cuerpo Principal - Pag. 9
Los dos grandes ausentes en la conferencia de las CGT y CTA fueron los jefes de los sindicatos que resultaron claves en la protesta.
Roberto Fernández (UTA, colectiveros y parte de los trabajadores del subte) y Omar Maturano (La Fraternidad, maquinistas de trenes), aún afiliados a la CGT oficialista de Antonio Caló, no habían adherido al primer paro nacional del 20 de noviembre de 2012.
En cambio, si estuvo presente Ricardo Cirielli (personal técnico aeronáutico) quien señaló a la Presidenta como “principal responsable” por “los linchamientos y escraches públicos” (“ella los empezó”, dijo Cirielli).
En tanto, el titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, sostuvo que al paro adhirieron pequeños y medianos productores del campo.
El paro transcurrió con pequeños incidentes en algunas ciudades del interior, y con un enfrentamiento entre la Gendarmería y protagonistas de un piquete (hubo alrededor de 50 en todo el país, con epicentro en los accesos a la Capital) sobre la Panamericana, en la ciudad de Campana, que dejó heridos leves.
La protesta también expuso diferencias entre los convocantes.
“Estar con Barrionuevo me revuelve el estómago. El 90 por ciento de los dirigentes sindicales son delincuentes”, dijo el delegado de los trabajadores del ferrocarril Sarmiento y dirigente de la Izquierda Socialista, Rubén “Pollo” Sobrero.
