CIUDAD DE BUENOS AIRES ( Urgente24 ) El desmesurado operativo lanzado ayer (29/01) por el Gobierno nacional en la avenida 9 de Julio, en el marco de una protesta de Barrios de Pie, dio mucho que hablar. Y esta tarde, una escena similar puede verse frente a la Secretaría de Relaciones Laborales -dependiente del ministerio de Trabajo- , donde ex trabajadores de la fábrica Kromberg & Schubert protestan en reclamo de ser reincorporados.
A diferencia del operativo de ayer, el de este jueves no cuenta con efectivos de la Gendarmería Nacional sino con Policía Federal e Infantería. Pero el despliegue, otra vez, resulta desmesurado teniendo en cuenta la cantidad de manifestantes.
La marcha es llevada a cabo por los trabajadores de la fábrica Kromberg & Schubert, que se encarga de la parte eléctrica de los tableros y circuitos de los autos para las empresas Volskwagen y Mercedes Benz. Los empleados se movilizaron por una ola de despidos de 54 compañeros en el mes de enero. Esto se suma a un conflicto iniciado en el 2013, cuando otros 12 empelados fueron dejados sin su puesto de trabajo.
Los trabajadores cuentan con el apoyo, además, de centros de estudiantes partidarios y miembros de partidos políticos de izquierda.
Según Infobae, el operativo se enmarca en un " nuevo protocolo de seguridad", según el cual "la policía rodea la protesta para aislarla y no permite que se extienda. En caso de haber incidentes, se cierra automáticamente ".
Una de las manifestantes, víctima de los despidos, contó su sorpresa al ver semejantes custodia: " Nos sorprende la policía porque la otra vez ni tuvimos. Nosotros negociábamos con ellos para ir levantando carriles, pero hoy ni nos permitieron cruzar, nos hicieron una cadena y no nos dejaban pasar" .
Ayer, en ocasion del despliegue en la 9 de Julio , Urgente24 destacaba que era sorprendente la respuesta del Gobierno nacional con el operativo exageradamente insólito de efectivos de Gendarmería y Policía Federal, con perros y camiones. ¿Es que acaso piensan reprimir la protesta? ¿O sólo buscan intimar?, nos preguntábamos (ver nota relacionada).
Este nuevo operativo confirma el creciente nerviosismo en la Casa Rosada, dispuesta a reprimir con tal de invisibilizar la conflictividad y el malestar social, aún chocando contra su propio relato de no criminalizar la protesta.
