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Por Emiliano Galli | LA NACION
DOHA, Qatar.- El Mundial será un ida y vuelta de viajeros en Brasil. Sin embargo, la particularidad del tráfico aéreo en una competencia en la que los partidos son en lugares tan distantes no deja contentos del todo a los operadores aéreos. Tanto es así que la compañía LAN considera que las operaciones durante la Copa Mundial de fútbol Brasil 2014 le reportará pérdidas por alrededor de 100 millones de dólares.
La aerolínea, que adquirió su par brasileño TAM en 2012 por 3900 millones de dólares para poner un pie en el mercado interno brasileño, entiende que el resultado será negativo, debido al desbalance que generará la dedicación de muchos aviones a distintas ciudades "llenos de ida y vacíos de vuelta".
Así lo indicaron altos funcionarios de la compañía chilena en la 70a. Convención Anual, organizada en este emirato de Medio Oriente por la Asociación Internacional de Líneas Aéreas (IATA, por sus siglas en inglés), ocasión en la que se celebraron además los 100 años de la aviación comercial.
"El Mundial será todo un desafío, pero ya lo tomamos a pérdida. Estimamos que [la pérdida] rondará los 100 millones", señaló a LA NACION un alto directivo de la compañía que prefirió no dar a conocer su nombre.
La compra de TAM perjudicó la calificación crediticia de LAN. De ser la compañía con mejores márgenes del mercado -alrededor del 10 por ciento- perdió la categoría "grado de inversión" al ver duplicada su deuda tras la adquisición de su competidor brasileño. Fuentes de la compañía señalaron que "recién en 2015, a lo sumo a principios de 2016", Latam Airlines Group recuperará su estándar crediticio.
No obstante, el CEO de Latam Airlines Group, el empresario chileno Enrique Cueto, fue más prudente frente a la prensa internacional a la hora de hablar de las operaciones en Brasil.
"Esto es algo nuevo para nosotros; recién después del Mundial sabremos [los resultados]. Será un desafío, porque el tráfico irá sólo en una dirección", dijo Cueto. Luego el también socio de LAN agregó: "Esto es una inversión, será duro al principio, pero positivo a largo plazo".
Un capítulo para la Argentina
Consultado por el diario chileno El Mercurio sobre las operaciones en la Argentina, Cueto expresó: "Estamos en la Argentina, nos gusta la Argentina y queremos quedarnos ahí. Algunos no entienden lo que es la competencia. La aviación es fundamental para el desarrollo de nuestra región porque no veremos en décadas grandes autopistas o trenes que conecten la región. Sólo lo hará el transporte aéreo, y con cada nuevo impuesto o restricción se va en contra de ese desarrollo", manifestó.
LAN suspendió el servicio a Bahía Blanca debido a la restricción que enfrenta para incorporar nuevas unidades destinadas a reemplazar aquellas que deben someterse a mantenimiento.
"¿Quién no entiende la competencia?", preguntó LA NACION. "No es fácil... Creo que es algo relacionado con nuestro principal competidor, Aerolíneas Argentinas. Están tratando de mejorar sus servicios y les gustaría tener mejores números en su balance. Y creen que la mejor manera [de lograrlo] es tener un competidor débil", dijo el ejecutivo en referencia a la empresa que preside. Más adelante se le preguntó si estaba en sus planes inmediatos suspender algún otro servicio de cabotaje en el país. "Esperemos que no", fue su escueta respuesta.
A la hora de comparar lo que sucede respecto de las restricciones que tienen en la Argentina con otros mercados, Cueto fue contundente: "Creo que la Argentina es un caso bastante aislado".
El Mundial de Brasil no sólo será un desafío para Latam. Las aerolíneas advirtieron que el estado de la infraestructura de los aeropuertos latinoamericanos en general, y brasileños en particular, no posee el grado de desarrollo que una operación como el Mundial necesita. Apagadas las luces de la mayor competencia de fútbol del mundo, se iniciarán los preparativos para los Juegos Olímpicos que se desarrollarán en 2016.
De hecho, IATA criticó en su documento final "la agresiva política de los gobiernos de América latina de desarrollar aeropuertos en asociación con el sector privado, y ya fuimos testigos de muchas de estas iniciativas en la región con muy pobres resultados", señaló a la prensa internacional Tony Tyler, director general de IATA. Según la asociación internacional, la industria enfrenta en todo el mundo, pero sobre todo en América latina -la segunda región con mayor potencial para el sector, después de Medio Oriente-, un incesante aumento de los costos y de las regulaciones que encarecen la operación y vulneran todavía más las utilidades de las compañías.
Una queja especial sobre Venezuela
"Somos una industria que factura una impresionante cifra de US$ 746.000 millones anuales, pero tenemos un margen de apenas 2,4%. Ganamos menos de US$ 6 por pasajero", explicó Tony Tyler. Pero fue Venezuela el único país de la región al que las aerolíneas le dedicaron una declaración explícita: "Lo que sucede allí es una vergüenza. El gobierno retiene US$ 4000 millones de las aerolíneas, al impedirles girar los dividendos. Esto pone en riesgo la conectividad de ese país", amplió Tyler. En el caso de LAN, Venezuela le adeuda US$ 150 millones.
