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La tasa es 0,8 puntos mayor que hace un año; importante incidencia en el norte del país
Las estadísticas oficiales continúan reflejando el deterioro del mercado laboral. Hace pocas semanas, el Indec y el Ministerio de Trabajo reconocieron que la caída en la tasa de desempleo registrada en el primer trimestre no se debió a que los desocupados encontraron un trabajo, sino a que dejaron de buscarlo. Ayer, el organismo de estadísticas admitió que en los primeros tres meses del año aumentó el trabajo en negro.
En el primer trimestre, según el Indec, el 32,8% de las personas que trabajaban no tenían un "descuento jubilatorio", es decir, trabajaban en negro. El resultado implica un crecimiento de 0,8 puntos porcentuales frente al mismo período del año anterior.
Para el economista jefe de Ecolatina, Lorenzo Sigaut Gravina, el crecimiento del empleo en negro va de la mano del "escenario recesivo" que atraviesa la Argentina. "En una situación así es usual que haya suspensiones, reducción de horas extras y aumento de la informalidad", dijo. El analista mencionó que en algunos sectores, como la construcción, la industria frigorífica y el sector autopartista, incluso se han registrado despidos.
El crecimiento del trabajo en negro, de hecho, coincide con la caída en la actividad en sectores con un peso importante en la generación de empleo, como la construcción y la industria manufacturera. Según el Indec, en el primer trimestre del año el sector fabril, que emplea a cerca de 1,2 millones de personas, acumuló una caída de 3,1% frente al mismo período del año anterior. Esto, según muestran las estadísticas oficiales, derivó en una caída de empleos en el sector. En el primer trimestre del año la cantidad de obreros ocupados en el sector manufacturero cayó 1,2% frente al mismo período de 2013.
En el caso de la construcción, la caída en la actividad fue de 2,6 por ciento. Según el Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric), la cantidad de trabajadores registrados en ese sector registró caídas interanuales en enero, febrero y marzo.
Varios analistas habían advertido que la destrucción de empleos en esos sectores no derivaría necesariamente en un crecimiento del desempleo, sino del cuentapropismo y del empleo no registrado. Es decir, las personas que se quedaron sin trabajo buscaron "changas" para seguir generando ingresos.
Problemas en el Norte
La incidencia del trabajo en negro se siente especialmente en el norte del país. De acuerdo con el informe del Indec, en la región noroeste el 40,6% de los trabajadores no están registrados, mientras que en el nordeste la tasa es de 35,1%. En ambas regiones, sin embargo, la incidencia del empleo en negro mostró una caída frente al primer trimestre del año pasado.
Lo contrario ocurrió en el Gran Buenos Aires (Capital Federal y el conurbano bonaerense), donde el trabajo en negro subió de 30,4% en el primer trimestre de 2013 a 32,5% en el mismo período de este año. El empleo en negro también aumentó en Cuyo (de 33% a 35%) y en la región patagónica (de 19,1% a 20,1%).
A finales de mayo, el Indec dijo que en el primer trimestre del año la tasa de empleo en las principales ciudades del país fue de 41,8%, 0,4 puntos menos que en el mismo período del año anterior. No obstante, en el informe publicado ayer, que sólo toma en cuenta a la población de 14 años y más, el organismo oficial dice que la tasa de empleo subió en 0,4 puntos, a 54,3 por ciento.
