Nota - Mundo - Pag. 23
pilotos mal dormidos e ine xperiencia en situaciones críticas
Dicen los expertos que la tecnificación permitió reducir la siniestralidad, pero que "cuando surgen problemas no se sabe cómo reaccionar".
Dos de los tres pilotos del vuelo de Air France 447 Río de Janeiro-París precipitado en el Atlántico en 2009, dormían pocos minutos antes de la caía y la nave quedó al mando de un joven todavía inexperto, publicó ayer el británico Daily Mail. Para colmo de males, debido al alto nivel de automatización en los aviones actuales, cuando surgieron inconvenientes para mantener el control, no supieron cómo reaccionar, con el dramático resultado conocido.
La investigación sobre la tragedia aérea que causó 228 muertos es de la revista Vanity Fair. De las transcripciones de las conversaciones en la cabina de pilotos entre David Robert, de 37 años, Pierre Cedric Bonin, de 32, y Marc Dubois, de 58, resulta que los dos mayores dejaron el avión en manos del más joven. Bonin se encontró solo ante una tormenta tropical y con los tubos Pitot, que registran datos esenciales de la nave en el exterior, congelados.
En particular se destaca que Dubois, el más grande, había pasado una "noche brava" en Río con su pareja, una azafata que estaba de franco y era cantante de ópera, antes de abordar el vuelo, por lo cual necesitaba descansar. Cuando se despertaron los que dormían, inmediatamente se dieron cuenta de lo que sucedía e intentaron maniobras por demás confusas y contradictorias hasta que uno de ellos gritó: "Mierda, estamos por morir!" El periódico citó al jefe de las investigaciones, Alain Bouillard, quien dijo que "si el comandante hubiera tenido el puesto de comando durante el paso en la zona de convergencia tropical, tal vez la historia sería otra". Bouillard agregó: "No creo que haya sido el cansancio a empujarlo a dejar el puesto sino una postura de cliente, que forma parte de la cultura de los pilotos de Air France." Hasta ahora se sabía que el comandante dormía para recuperarse de la noche agitada en la ciudad carioca en compañía de su pareja.
"No dormí lo suficiente anoche. Una hora no alcanza", declaró antes de irse a dormir en la cabina para la "siesta", un espacio para dos cuchetas detrás de la cabina de pilotos.
La revista cita también declaraciones de expertos en construcción de aviones y de seguridad en vuelo que señalan que en las últimas décadas, la automatización fue ganando espacio al punto que hoy día casi el 98% de las acciones las realizan sistemas computarizados. "El problema es cómo resolver ese 2% y sobre todo cómo hacen los pilotos para darse cuenta de que están en ese 2%", dice uno de los especialistas consultados por la publicación. Esto fue así a pesar de que en los '70, los sindicatos de pilotos rechazaron la presión de las compañías para retirar el ingeniero de vuelo a las cabinas.
En el caso del vuelo 447, luego de que se congelaron los dispositivos y los equipos mostraron señales falsas, un ingeniero podría haber interpretado lo que ocurría. Pero los pilotos no supieron lo que ocurría ni cómo resolver la pérdida de altitud en el Airbus 330.
El 1 de junio de 2009 el vuelo 447 partió de Río de Janeiro y nunca llegó a destino, con los 216 pasajeros y 12 tripulantes. Es la tragedia con más muertos en la historia de Air France. Dos años más tarde fue encontrada la caja negra
El detalle Noche brava El comandante dormía y quedó a cargo un joven piloto. El avión iba de Río a París, fue en 2009.
