Histórico deshielo. Las rutas estarán operativas desde septiembre. Habrá una veintena de vuelos diarios a La Habana y diez a otros aeropuertos de la isla caribeña.
Cuba y Estados Unidos acordaron ayer restablecer los vuelos regulares directos entre ambos países por primera vez en más de 50 años, en un avance más en la política de deshielo impulsada por el presidente estadounidense, Barack Obama, hacia la isla. “Es un día histórico en la relación entre Cuba y Estados Unidos”, dijo el secretario norteamericano de Transporte, Anthony R. Foxx en el acto de la firma del acuerdo, en el que estuvo acompañado por el secretario adjunto para Asuntos Económicos y de Negocios del Departamento de Estado, Charles Rivkin. “Significa más que un acuerdo nuevo”, afirmó Foxx, “significa un hito en la relación de ambos países”, destacó en su discurso en el emblemático hotel Nacional de La Habana. “La firma del memorando marca el inicio de una nueva etapa en las relaciones entre Cuba y Estados Unidos”, dijo el ministro de Transporte cubana, Adel Yzquierdo.
Las rutas aéreas estre ambos países estarán operativas a partir de septiembre y el acuerdo contempla 20 vuelos diarios a La Habana y 10 vuelos diarios a otros aeropuertos de la isla, aunque en una segunda etapa podrían llegar a 110 vuelos diarios, señaló Rivkin. Una vez firmado el acuerdo se abre el proceso de licitación para que las aerolíneas estadounidenses presenten sus solicitudes al Departamento de Transporte sobre las rutas que prefieren operar hacia Cuba.
Antiguos pleitos. El acuerdo no excluye a los vuelos de tipo chárter que ya operan hacia la isla, pero por el momento sí deja al margen a la compañía estatal Cubana de Aviación debido a pleitos en Estados Unidos sobre confiscaciones de bienes en la isla tras el triunfo revolucionario de 1959, por lo que los aviones cubanos podrían ser embargados si entran en territorio norteamericano. “Gracias a este memorando las aerolíneas de ambos países podrán también concertar acuerdos comerciales de colaboración, como códigos compartidos y contratos de arrendamientos de aeronaves”, señaló Yzquierdo.
El acuerdo tiene un fuerte valor simbólico por lo que significa de normalización entre ambas partes en un momento en el que se baraja la posibilidad de un viaje a la isla del presidente Barack Obama, antes de terminar su mandato. Pero la medida tiene también una importante dimensión económica, especialmente para el sector turístico de la isla. Cada vez es más frecuente ver a norteamericanos paseando por La Habana a pesar de la prohibición que tienen de hacer turismo por parte de su gobierno.
Los vuelos comerciales entre Cuba y Estados Unidos se cancelaron hace más de 50 años, aunque desde mediados de la década de 1970 se reanudaron pero tan solo chárter.
Los actuales vuelos fletados continuarán existiendo, pero las nuevas rutas ampliarán la actual oferta además de ofrecer mayores facilidades como la reserva de los billetes vía online y el servicio de atención telefónica las 24 horas para los viajeros estadounidenses. Actualmente, algunas compañías como American Airlines o JetBlue fletan aviones charter hacia la isla desde ciudades como Tampa, Nueva York o Los Angeles, pero ya hay otras compañías que manifestaron su interés por la apertura de vuelos.
Tras el histórico anuncio el 17 de diciembre de 2014 del restablecimiento de las relaciones bilaterales, Obama flexibilizó los viajes a la isla pero todavía están restringidos los que sean por turismo. Entre las 12 categorías aceptadas para los visitantes norteamericanos se encuentran los intercambios culturales, académicos o religiosos, entre otros.
Mucha demanda, pocas plazas. El gobierno cubano necesita el aumento de los ingresos turísticos para mejorar la maltrecha economía, pero también se enfrenta a no poder hacer frente a tanta demanda. El año pasado casi 160.000 estadounidenses visitaron la isla, según un reportaje de la Televisión cubana. Pero 2016 puede haber un alza sin precedentes. Al cierre de enero último, el número de extranjeros que visitaron Cuba llegó a los 417.764, con los canadienses a la cabeza de la lista (173.727), Italia en segundo puesto (23.009), Alemania en tercero (21.473), y Estados Unidos (20.997), relegando a Francia a un quinto escalón (19.140).
Reclamo por el fin del embargo
El ministro de Comercio Exterior cubano, Rodrigo Malmierca, reclamó ayer en Washington que Obama adopte más medidas de supresión de sanciones a la isla para impulsar el intercambio comercial bilateral. De acuerdo con Malmierca, quien inició ayer una visita oficial de tres días a la capital estadounidense, el Poder Ejecutivo estadounidense aún tiene atribuciones para aplicar estas medidas, en especial el uso del dólar en las exportaciones cubanas.
