Victoria Donda lanzó la ironía durante la reunión y Sergio Massa la remarcó más tarde en privado con los integrantes del Frente Renovador que habían convocado a los referentes sindicales y a los diputados opositores para reclamar en conjunto medidas a favor de los trabajadores. “Macri está cumpliendo las promesas a los sectores concentrados y también cumple con la unidad, la del movimiento obrero en 100 días de su gestión”, aseguró la legisladora de Libres del Sur. El salón Delia Parodi de la Cámara de Diputados lució colmado y con una asistencia inusual en los últimos años: los titulares de las tres CGT, las dos CTA y representantes de todos los bloques no oficialistas.
Armada inicialmente para impulsar una reforma del Impuesto a las Ganancias, ese punto apareció en los discursos aunque quedó en un segundo plano: los gremialistas coincidieron en expresar como principal preocupación los despidos en el sector público y privado, también la inflación y los aumentos de tarifas, la situación de los jubilados y hubo críticas al Protocolo de Seguridad para las protestas. Los diputados aseguraron que buscarán unificar proyectos en cada uno de los temas.
En caso de un acuerdo y la confirmación de la decisión de avanzar los bloques presentes reunirían unos 150 votos, cifra que superaría holgadamente la necesaria para aprobarlos, aunque al menos una parte no se precitará. Massa –se puso al frente de la presentación, abrió y cerró con su discurso- adelantó que exigirá a Emilio Monzó, presidente de la Cámara, iniciar el debate en las comisiones con los proyectos de todos los diputados incluidos los de Cambiemos, con la intención de que participe el oficialismo. “No nos interesa aprobar algo para que lo frene el Senado o lo vete el Presidente”, argumentaron en el Frente Renovador. De cualquier modo, Massa aseguró que el objetivo será que los debates lleguen al recinto antes del 30 de junio. El kirchnerismo y el Frente de Izquierda se habían expresado a favor de avanzar con mayor celeridad.
“Los despidos se están acentuando y preocupan mucho, no sólo en algunos sectores sino en la totalidad del movimiento obrero”, arrancó Hugo Moyano (CGT Azopardo) la exposición de los gremialistas, y cuestionó a los legisladores de Cambiemos por no asistir: “El que no está presente no tiene interés en escuchar a los trabajadores”. Antonio Caló (CGT Alsina) consideró “prioridad” declarar la emergencia ocupacional (“sin trabajo no hay Impuesto a las Ganancias”, marcó) y Luis Barrionuevo (CGT Azul y Blanca) dejó una advertencia: “No nos gustaría salir a la calle, porque cuando el movimiento obrero sale a la calle no sabemos cuándo volvemos”. Los dirigentes insistieron en que habrá unificación de la CGT.
Pablo Micheli (CTA autónoma) pidió la prohibición de los despidos (“van a engrosar el número de pobres, que ya llega al 30%”) y Hugo Yasky (CTA de los Argentinos) lo consideró “un castigo a los trabajadores y el principal problema”. Ambos, aunque con mayor prudencia, también coincidieron en que la “unidad de acción” podría ser el paso previo a la reunificación de la central. Luego hablaron más sindicalistas, entre otros Sergio Palazzo (La Bancaria), Andrés Rodríguez (UPCN), Omar Maturano (La Fraternidad), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias) y Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento).
En el turno de los diputados predominaron las coincidencias con los reclamos de los gremialistas, aunque no podían faltar algunas pujas y tironeos por la palabra. Asistieron unos 40: Héctor Recalde, Axel Kicillof, Edgardo Depetri, Carlos Kunkel y Héctor Tomas por el Frente para la Victoria; Graciela Camaño, Felipe Solá, Marco Lavagna, Facundo Moyano y Héctor Daer por el Frente Renovador; Diego Bossio y Oscar Romero por el bloque Justicialista, el socialista Hermes Binner, Margarita Stolbizer (Massa le dio el rol de coordinadora), Néstor Pitrola y Myriam Bregman por el Frente de Izquierda, entre otros.
“Los escucho hablar y pienso que con la campaña del miedo nos quedamos cortos”, aseguró Tomas (FPV). “Este es un mensaje para que se equilibre la balanza. No podemos seguir en un país en el que la agenda la ocupen los temas de los empresarios”, dijo Massa, exultante por la convocatoria. El kirchnerismo –con más legisladores aunque sin posibilidad de reunir esas presencias- aceptó su rol con cierto desagrado.
Encuentro. Diputados del Frente Renovador, del progresismo y del Frente para la Victoria recibieron a las 3 CGT en la camara de diputados, para frenar los despidos.
