Ocurrió hace dos años y murieron 10 personas. Ayer se conocieron oscuros
manejos para el vuelo.
Un informe técnico conocido ayer reveló las fallas hasta ahora secretas
que llevaron a la tragedia de Punta del Este, cuando una avioneta cayó
hace más de dos años en el aeropuerto esteño y provocó la muerte de 9
argentinos y una portuguesa.
El informe técnico develó que la nave llevaba sobrepeso; que se adulteró
su configuración para llevar más pasajeros que los autorizados; y que
los pilotos, que fallecieron en el accidente, estaban presionados por
los dueños de la empresa para realizar los vuelos y ni siquiera estaban
debidamente habilitados.
Los expertos de la Comisión Investigadora de Accidentes e Incidentes de
Aviación (Ciaia), del Ministerio de Defensa de Uruguay, obtuvieron los
videos del Aeródromo de San Fernando del cual la avioneta despegó el 19
de marzo del 2015, en los cuales se observa que una hora antes del
despegue fue reconfigurada para que se pudieran sentar 8 personas,
además de los dos pilotos, a pesar de que estaba autorizada sólo para
seis pasajeros.
Se trata del informe final realizado por las autoridades aéreas de
Uruguay que ya fue incorporado al expediente penal que tiene la jueza
letrada de Primera Instancia de Maldonado, Adriana Morosini Pérez, sobre
el accidente aéreo en el que fallecieron empleados de la empresa La
Rural S.A. que viajaron a Punta del Este para supervisar los trabajos
que se estaban realizando para la instalación de un centro de
exposiciones.
El avión bimotor Beechcraft Kin Air B90, matrícula LV-CEO, perteneciente
en mayor parte a la empresa Droguerías Meta S.A., partió de San Fernando
cerca de las 8.20 de la mañana del 19 de marzo de ese año piloteado por
Luis Pivida (59) y Diego Chiaradía (45), y aterrizó una hora después en
el Aeropuerto de Laguna del Sauce, en la ciudad balnearia uruguaya de
Punta del Este.
Según el informe, el avión despegó nuevamente de ese aeropuerto a las
20.38 y se estrelló pocos segundos después en la Laguna del Sauce,
ubicada sobre uno de los extremos de la pista, tras lo cual la aeronave
se incendió y fallecieron todos sus ocupantes.
El informe realizado por los expertos señala que las causas del
accidente fueron múltiples, pero aclararon que "la aeronave no cumplió
con el perfil recomendado por el fabricante para el despegue en cuanto a
sus velocidades y régimen de ascenso", y que no cumplía "con las
Reglamentaciones Aeronáuticas", ya que "no estaba habilitada para
realizar vuelos contratados".
Por otra parte, señala como conclusiones finales que los pilotos no
poseían una adecuada habilitación para volar este tipo de aeronaves, que
sufrían "presiones de los dueños del avión para realizar los vuelos", y
que estaban "cansados y estresados".
También se conoció, de acuerdo a los libros de viajes del aeródromo de
San Fernando, que la aeronave había sido contratada para realizar un
vuelo desde La Plata hacia San Luis y con regreso a San Fernando, que
ese viaje fue suspendido e inmediatamente se montó el operativo para que
despegue hacia Punta del Este. Se constató asimismo que la aeronave
estuvo en pista a punto de despegar a La Plata a las 6 de la madrugada
de ese 19 de marzo, pero que los pilotos Pivida y Chiaradía recibieron
una llamada de urgencia que los obligó a detener los motores, a que
bajaran los dos pasajeros que llevaban y que regresaran al hangar.
Se determinó que la nave tenía exceso de peso y que los pilotos no
tenían el descanso adecuado.