Este cambio aparecería en el presupuesto del año próximo
DECLARACIONES
BUENOS AIRES (Redacción) En momentos donde el presupuesto 2018 aún no llegó al Congreso, se conoció que Aerolíneas Argentinas contará con una reducción del déficit de un 41% respecto a 2017, con lo cual habrá un ajuste en la necesidad de subsidios de 100 millones de dólares, frente a los 170 millones de dólares que recibía este año, según explicó Mario Dell'Acqua, presidente de la compañía.
El Estado le transfirió a la empresa unos $ 26.000 millones, entre 2009 y 2015, del cual, según su presidente, ya se ejecutó cerca del 80% de lo enviado por el Estado este año, aunque no necesitará refuerzos porque "las necesidades se concentran en el primer semestre", tal y como aseveró a un matutino.
Para Dell'Acqua, Aerolíneas Argentinas hoy no tiene ninguna ruta deficitaria. "Ninguna pierde; se pierde no volando; cuando se programan bien y se eficientiza el uso de los aviones, no hay rojo y es menos la cantidad de dinero que todos los argentinos deben poner para sostener la empresa", detalló y agregó que en dos años la cantidad de pasajeros aumentó un 28%, en un marco de actividad económica que combinó recesión con una mejora moderada que recién ahora empieza a percibirse en determinados sectores.
"La eficiencia es lo que ayudó a tener mayores ventas sin una suba de precios en los pasajes económicos; la combinación dio una mejor situación financiera", dijo y añadió: "Volveremos a tener un DNI de compañía -graficó el funcionario-, podremos conseguir financiación a menores tasas y seguir creciendo". De los dos balances, el peor es el de 2015, cuando convergieron las pérdidas del año anterior.
Dell'Acqua se refirió a la llegada de las Low Cost y reiteró que no le temen a la mayor competencia en el mercado que se dará cuando todas las firmas que solicitaron rutas comiencen a operar: "Está demostrado que con productos beneficiosos hay consumo. En los horarios menos requeridos podemos ofrecer precios muy convenientes, y hay un segmento que se puede aprovechar; el cliente corporativo busca calidad de servicio, puntualidad y que no haya cancelaciones, y lo paga", concluyó.
Por último, al ser consultado sobre la frecuencia entre Buenos Aires y Caracas, suspendido hace un mes por la situación política venezolana, afirmó que no tiene fecha de regreso. La situación era "insostenible, con riesgos de que el avión quedara varado en destino por las inspecciones y exigencias", dijo Dell Acqua. Hacía tiempo que la tripulación no se quedaba en la capital venezolana, sino que el avión iba vacío hacia Bogotá, donde hacía noche.
