buscador

CEFALEAS

El término cefalea hace referencia a los dolores y molestias localizadas en cualquier parte de la cabeza, en los diferentes tejidos de la cavidad craneana, en las estructuras que lo unen a la base del cráneo, los músculos y vasos sanguíneos que rodean al cuero cabelludo, cara y cuello. En el lenguaje coloquial cefalea es sinónimo de dolor de cabeza.

Si bien el dolor de cabeza es un trastorno generalmente benigno y transitorio que en la mayor parte de las ocasiones cede espontáneamente, o con la ayuda de algún analgésico, puede estar también originada por una enfermedad grave que ponga en peligro la vida del paciente, como meningitis, tumor cerebral o hemorragia subaracnoidea.

La migraña, según The National Migrain Association, es una forma de cefalea en la que el dolor de cabeza es un síntoma, que puede estar acompañado por náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz, dolor de oídos, entre otros, y se produce por vasodilatación cerebral.

Pocas veces las cefaleas o las migrañas tienen consecuencias graves, pero causan mucho sufrimiento y malestar a quien la padece y son de gran importancia económica por el elevado número de pérdida de jornadas de trabajo que ocasionan.

Datos y cifras:

• Las cefaleas son uno de los trastornos más comunes del sistema nervioso.

• En general, se calcula que un 47% de los adultos han sufrido por lo menos una cefalea en el último año.

• Las cefaleas se acompañan de problemas personales y sociales como la discapacidad, el deterioro de la calidad de vida y las pérdidas económicas.

• En todo el mundo, solo una minoría de las personas que sufren cefaleas reciben un diagnóstico apropiado formulado por un profesional sanitario.

• A escala mundial, las cefaleas han sido subestimadas, se conocen mal y no reciben el tratamiento adecuado.

Clasificación y etiología:

La cefalea es un síntoma que puede estar originado por una interminable lista de causas. Existe una sociedad científica internacional, la Sociedad Internacional de Cefaleas que publica una clasificación y explica los distintos orígenes de esta afección. La siguiente tabla es la última clasificación de esta sociedad, que las divide en primarias y secundarias.

a) Cefaleas primarias: son aquellas en las que se considera que no son parte de otra enfermedad. Constituyen alrededor del 78 % de las cefaleas, tienden a no ser graves, aunque el dolor puede ser intenso:

 Cefalea tensional: es la más frecuente. El dolor se presenta en toda la cabeza de manera regular. La sensación es que algo la aprieta en su perímetro y suele producirse por malas posturas. Mejora mucho con la actividad física y la relajación. El tratamiento puede requerir medicación preventiva constante si los ataques son muy frecuentes.

 Migraña: se trata de una cefalea que afecta entre el 12 y 16 % de la población mundial. Produce ataques de dolor intenso que de forma característica afecta solo a la mitad derecha o izquierda de la cabeza, y suele acompañarse de nauseas, vómitos y sensación pulsátil.

 Cefalea en racimos: es un dolor de cabeza extraordinariamente intenso que también recibe el nombre de cefalea histamínica, cefalea de Horton o de Cluster Headache.

 Otras cefaleas primarias: incluye a aquellas asociada a la actividad sexual, la cefalea benigna por tos o por el ejercicio.

b) Cefaleas secundarias: son aquellas que están provocas por una enfermedad conocida. Pueden deberse a patologías muy diversas, como por ejemplo:

 Cefalea por traumatismo craneoencefálico.

 Cefaleas por causa vascular (tanto de arterias como de venas): 1) causada por accidente cerebro vascular; 2) causada por arteritis de la temporal.

 Cefaleas por trastornos intracraneales no vasculares: 1) Cefalea por aumento de la presión del líquido céfaloraquídeo (hipertensión endocraneana); 2) Cefalea por disminución de la presión del líquido cefalorraquídeo; 3) Cefalea por tumor intracraneal.

 Cefaleas por medicamentos, drogas o sindrome de abstinencia. Cefalea por abuso de medicación.

 Cefaleas por infecciones intracranealas: 1) Cefaleas por meningitis o encefalitis: 2) Cefaleas por infecciones generales, como la gripe.

 Cefaleas por trastornos de la homeostasis: hipoxia, diálisis, hipertensión arterial, hipotiroidismo, etc.

 Dolor facial por otras alteraciones craneofaciales: 1) Cefaleas causadas por la otitis; 2) Cefaleas causadas por sinusitis; 3) Cefaleas causadas por enfermedades de los ojos, como el glaucoma.

 Cefaleas de causa psiquiátrica.

 Cefaleas por neuralgias de los nervios craneales: 1) Cefalea por neuralgia del trigémino o del glosofaríngeo; 2) Cefaleas por estímulos fríos o del helado.

Los mecanismos que producen las cefaleas son diferentes según el tipo de la misma:

 Espasmo o inflamación de los músculos de la cabeza y el cuello.

 Distensión, tracción o dilatación de los vasos sanguíneos de la cabeza, incluyendo las arterias y venas tanto del interior como del exterior del cráneo.

 Inflamación, compresión o tracción de los nervios sensitivos craneales.

 Irritación de las meninges en la cefalea de la meningitis.

 Hipertensión intracraneal, es decir aumento de la presión del liquido cefalorraquideo en el interior del cráneo.

Puede ser una manifestación de la enfermedad de Wernicke (encefalopatía por avitaminosis B1).

Diagnóstico:

El diagnóstico médico se basa en tres pilares: la Historia Clínica, la exploración del paciente y las pruebas complementarias.

Historia clínica: es importante conocer los siguientes datos, que nos ayudarán a reconocer el tipo de cefalea y su etiología:

o Sexo, edad, hábitos, profesión, antecedentes personales y familiares. También la edad de inicio de la cefalea, su evolución y periodicidad.

o Presencia o ausencia de pródromos, características del dolor, duración, frecuencia y localización.

o Síntomas acompañantes, como náuseas, vómitos o fiebre.

o Respuesta al tratamiento.

Exploración física general y neurológica: la exploración orienta sobre el tipo de cefalea que presenta el paciente. Dependiendo de los síntomas acompañantes, el tipo de dolor, la edad y los antecedentes pueden ser necesarias diferentes tipos de exploraciones, se citan algunas de las que se emplean más habitualmente:

 Toma de la tensión arterial para descartar hipertensión arterial.

 Signos meníngeos que pueden ser positivos en caso de meningitis.

 Fondo de ojo para tratar de determinar si existe hipertensión endocraneal.

 Exploración de senos paranasales si se sospecha sinusitis.

 Exploración de la arteria temporal para comprobar si existe arteritis de la temporal.

 Exploración neurológica, en busca de hemiparesia, ataxia, disminución del campo visual u otras alteraciones motoras y sensitivas.

Exámenes complementarios: el médico puede recomendar la realización de diferentes pruebas complementarias en casos seleccionados. En muchas ocasiones los datos principales provienen del interrogatorio y de las características localización e intensidad del dolor. Es usual la solicitud de estudios analíticos, entre ellos el hemograma, el EEG, VSG, PCR etc.

También pueden solicitarse radiografías de cráneo y columna cervical si se sospecha sinusitis o lesiones óseas y TAC o RMN para estudiar con detalle el tejido cerebral y detectar estructuras anómalas como tumores cerebrales.

Signos clínicos de gravedad:

Los siguientes signos o síntomas pueden ser indicativos de procesos agudos o de mayor gravedad, por lo que obligan a un estudio más exhaustivo y específico:7

1. Inicio brusco con dolor de gran intensidad, o bien durante el ejercicio, especialmente si la cefalea es de nueva aparición y muy intensa. Podría ser sugestivo de una hemorragia subaracnoidea.

2. Curso progresivo, es decir aumento gradual en el transcurso de días o semanas. Puede indicar el crecimiento de una lesión ocupante de espacio, como un tumor cerebral.

3. Cefalea acompañada por alteraciones del nivel de conciencia, signos meníngeos, convulsiones u otros signos neurológicos que hagan sospechar la existencia de un proceso grave.

TRATAMIENTO.

El tratamiento varía ampliamente según la causa y el tipo de cefalea. Las mejores opciones para tratar las cefaleas más comunes son los analgésicos como el paracetamol o aspirina, pero solo deben utilizarse en casos de dolor de cabeza leve o moderado que ocurra ocasionalmente. En caso de cefalea intensa, frecuente o con alguno de los síntomas de alarma, debe consultarse siempre con el médico y evitar la automedicación.

Medidas complementarias al tratamiento:

• Supresión de factores desencadenantes: una vez identificado el factor intentar suprimirlo. Abstenerse en la ingesta de ciertos alimentos o prevenirse en la exposición de algunos factores medioambientales.

• Dieta: evitar la ingesta de aquellos que pueden desencadenar crisis jaquecosas. Éstos son: algunos tipos de quesos, chocolate, vino tinto, cafeína, embutidos, salchichas, salsas, etc.

• Suspensión del tabaco.

• Regularización del sueño: es conveniente dormir 6 a 8 horas diarias.

• Actividad física: el ejercicio debe ser placentero y recreativo y transformarse en una forma de vida, ya que esta actividad aumenta los niveles de endorfinas, que son sustancias naturales analgésicas de nuestro organismo.

D'Onofrio 158 - (1702) Ciudadela - Buenos Aires - Argentina, Teléfono: +54 011 4653 3016/19, aviones@aviones.com
cartel_apta