Hace 50 años exactamente, un 20 de Octubre de 1961, se fundaba en Ginebra, Suiza, La Federación Internacional de Asociaciones de Controladores Aéreos (IFATCA, según su sigla en inglés). Creada, siguiendo el espíritu que reside en todos los profesionales del control del tránsito aéreo, comprometido en garantizar diariamente a millones de pasajeros la máxima seguridad en las operaciones en vuelo. Sus ideales y representación se han expandido poderosamente en su primer medio siglo de vida, alcanzando en la actualidad a 137 asociaciones, que agrupan 50.000 miembros en 130 países. Bien vale por lo tanto, que los compañeros controladores aéreos celebren el 20 de octubre como su Día Profesional.
Desgraciadamente, la profesión de Controlador de Tránsito Aéreo es aún en nuestro país, no suficientemente conocida en sus necesidades y exigencias, como subestimada en su rol esencial para asegurar la seguridad aérea. Por esa ignorancia, sumada a la desinformación producto de espurios intereses empresariales y/o sindicales, los controladores aéreos no son todavía debidamente valorados ni aeronáutica ni socialmente. Y, muchas veces se los acusa injusta y falsamente, por las ineficiencias en la prestación de los servicios aerocomerciales de la que son totalmente ajenos. Con el fin de ocultar sus responsabilidades exclusivas las empresas; otro personal aeronáutico o; el Estado nacional, por su falta crónica de inversión en equipamiento técnico adecuado, tanto en cantidad como en la tecnología necesaria.
Hoy APTA debe celebrar también junto a los compañeros Controladores del Tránsito Aéreo argentinos, todas las trascendentales conquistas convencionales, laborales, salariales y sociales conseguidas desde haber comenzado por su voluntad y decisión, la cual nos honra, a trabajar mancomunadamente como la única entidad gremial que los representa. Para defender, con la combatividad y honestidad inquebrantables, con las que APTA ha trabajado durante los últimos 20 años para todos sus afiliados, los legítimos derechos e intereses de los Controladores de Tránsito Aéreo de la Argentina.
Es muchísimo lo conseguido en conjunto, pero aún faltan alcanzar muchas más justas reivindicaciones, en cuanto condiciones de trabajo, entrenamiento, remuneración, escalafón e infraestructura tecnológica. No solo por el respeto que debe tener y las necesidades que tiene la profesión de Controladores de Tránsito Aéreo; sino para garantizar la máxima eficiencia y seguridad, en las complejas tareas de planificación, organización, dirección y control de tránsito aéreo, que dichos profesionales deben ejercer. Esenciales, para proteger la vida de todos aquellos que viajan en el transporte aéreo dentro del territorio nacional.
La misión y el trabajo de los Controladores de Tránsito Aéreo argentinos, están expresadas desde 1961 por su Federación Internacional, bajo la leyenda “Un Cielo Una Voz”.
Buenos Aires, 20 de Octubre de 2011
Ricardo Cirielli
Secretario General
