Se denomina hipertrofia prostática benigna o HPB al agrandamiento de la próstata, de condición innocua, y que se manifiesta en los hombres generalmente a partir de los 60 años. (aunque su crecimiento comienza muchos años antes) La próstata es una de las glándulas sexuales masculinas. Es del tamaño aproximado a una nuez y sirve para la producción de líquido seminal, que forma parte del semen o esperma.
Está ubicada encima del recto y debajo de la vejiga. La próstata rodea la uretra, donde ésta se conecta a la vejiga. Por ello, cuando la próstata crece suele haber dificultades al orinar o en las relaciones sexuales.
Esta patología es mucho más frecuente que el cáncer de próstata, y aunque es de características benignas comparte con aquel la mayor parte de los signos y síntomas.
En su estadio más inicial, puede no producir signos ni síntomas, pero a medida que el tumor crece pueden notarse algunos de los siguientes síntomas:
• Dificultad para comenzar o terminar de orinar.
• Disminución de la fuerza del chorro de orina.
• Goteo al final de la micción.
• Micción dolorosa o con ardor.
• Orinar frecuentemente pero poca cantidad cada vez, especialmente por la noche.
• Eyaculación dolorosa.
• Incapacidad para orinar.
• El sedentarismo: las personas que están sentadas por largos períodos incrementarán los síntomas pues estar sentado origina congestión de la zona pelviana.
• La realización de largos viajes en motocicleta, por idénticos motivos.
• La ingesta de alcohol: por actuar como un vasodilatador periférico.
• Los condimentos y las frituras y café: se comportan como irritantes directos.
1) Tacto rectal: debe formar parte del chequeo físico anual recomendado para los hombres mayores de 40 años de edad. Mediante la inserción de un dedo enguantado en el recto, el médico palpa la superficie de la próstata a través de la pared del intestino. Masas sospechosas, texturas anormales o durezas llevarán a investigaciones posteriores.
2) Antígeno prostático específico: (PSA en inglés) es una proteína producida en la próstata que suele elevarse cuando el cáncer está presente. Los niveles de PSA pueden ayudar en el seguimiento de un paciente tanto con Ca de próstata como con HPB.
3) Punción biopsia de próstata: la única manera de determinar si una masa sospechosa es cáncer de próstata o HPB es examinar microscópicamente una muestra de tejido tomado del área. Esta muestra puede ser extraída por una aguja colocada directamente en la próstata a través del recto o del perineo (espacio entre el escroto y el ano). Este procedimiento se llama punción-aspiración con aguja fina o biopsia con aguja. También puede obtenerse una biopsia mediante una operación.
4) Ecografía prostática transrectal: informa respecto del tamaño, peso aproximado y características morfológicas. Se la realiza con fines diagnósticos y como parámetro para el seguimiento de la enfermedad.
5) Otros estudios: como la uroflujometría que mide la fuerza del chorro miccional.
El tratamiento generalmente es sintomático, para los cual existen medicamentos específicos que mantienen el tamaño de la próstata en tamaños tolerables.
No obstante, a veces es necesario recurrir a la cirugía porque su agrandamiento origina dificultades para orinar e impotencia sexual.
RECORDAR que aunque hay gran similitud de signos y síntomas, hipertrofia de próstata no es sinónimo de cáncer de próstata. Sin embargo, cualquier hombre de cualquier edad debe recurrir a su médico cada vez que se le presente algunos de los síntomas arriba señalados, pues el diagnóstico precoz sigue siendo la principar herramienta terapéutica, aún cuando se trate de una enfermedad de características benignas. La HPB no debe ser confundida con otra sigla HPV ya que una y otra no guardan ninguna relación.11/12/09