Argentina podría acceder a más de un millón de vacunas de Estados Unidos
Son aquellas que AstraZeneca tiene almacenadas en ese país y que no se aplican
Con la mira en empezar a vacunar personas de 30 a 39 años antes de fin de mes, el Gobierno acelera las negociaciones en distintos frentes. La liberación de 60 millones de dosis retenidas en ese país podría representar una nueva fuente de abastecimiento para los operativos de vacunación que alcanzan récords. Los próximos vuelos que faltan y los avances en las conversaciones con otros países.
Joe Biden no le donará vacunas a la Argentina ni a México ni a Brasil ni a Chile, pero en los próximos días dará un paso que le permitirá al gobierno de Alberto Fernández comprar y recibir de inmediato más de un millón de vacunas: el presidente norteamericano va a liberar 60 millones de dosis que AstraZeneca tiene almacenadas en Estados Unidos y que no se aplican. Esa cantidad de vacunas reforzará las que están viniendo. Como se sabe, el lunes arribarán 934.000 desde Albuquerque, Estados Unidos, pero durante la semana próxima llegará otro vuelo desde Albuquerque y uno más desde México, éste último con unas 800.000 dosis. El 25 o 26 de junio se concretará un nuevo vuelo de Aerolíneas Argentinas a China y vendrán dos millones de dosis de Sinopharm, mientras que se firmó el contrato con el laboratorio canadiense-chino Cansino, pero las vacunas recién estarán en Ezeiza alrededor de octubre.
USA I
Como se sabe, Washington decidió comprar 500 millones de dosis de Pfizer para distribuir entre países de bajísima capacidad económica: en América Latina, Honduras, Haití, Bolivia. No se trata sólo de un gesto humanitario ni siquiera de contrarrestar la influencia que están consiguiendo Rusia y China en distintas zonas del globo gracias a la diplomacia de las vacunas. La cuestión de fondo es que los expertos norteamericanos le han dicho al gobierno de Biden que si no se vacuna masivamente a nivel mundial, habrá nuevas y más agresivas variantes que llegarán de manera indefectible al país del norte. El mejor ejemplo es el de la variante Delta, de la India: ya hay circulación comunitaria.
Para la Argentina la vacunación mundial es relevante, pero la expectativa está puesta en otro gesto que exhibe la prepotencia norteamericana en la cuestión del Covid: el país del norte no permitió la exportación ni de vacunas ni de insumos para fabricar vacunas. En ese marco, están retenidas en Estados Unidos 60 millones de dosis de la vacuna de Oxford/AstraZeneca que no se aplican ni se pueden aplicar porque el laboratorio ni siquiera presentó la documentación para pedir que se autorice en USA.
El embajador argentino en Washington, Jorge Argüello, viene haciendo gestiones desde hace semanas y fuentes del gobierno norteamericano ahora hicieron trascender que la liberación de esas vacunas “es cuestión de días”. Si eso se concreta, la Argentina podría acceder a más de un millón de vacunas. La cifra incluso podría estar cerca de los dos millones. El resto, el laboratorio inglés lo distribuiría entre los demás países con los que tiene enormes atrasos.
USA II
En Albuquerque, Nuevo México, está la gigantesca planta farmacéutica llamada AMRI, parte de un complejo de numerosas plantas en Estados Unidos y Europa. Hacia allí derivó AstraZeneca el terminado de las vacunas cuyo componente activo se fabricó en la Argentina, en el laboratorio mAbxience, de Hugo Sigman. El plan original era completar la fabricación en Liomont, de México, pero ese laboratorio tuvo dificultades para acceder a algunos de los insumos y luego se complicó el control de calidad. De hecho, AstraZeneca sigue enviando hasta hoy la sustancia esencial desde Garín, parte a México y parte a Albuquerque.
Desde AMRI vendrán el lunes, como anunció la ministra Carla Vizzotti, 934.000 dosis de Oxford/AstraZeneca en un vuelo que aterrizará en Ezeiza por la mañana. Fuentes del laboratorio le confirmaron a Página/12 que la próxima semana habrá una nueva remesa desde Albuquerque, de manera que el total esperable desde Estados Unidos estará cercano a 1.500.000 dosis.
México
Los presidentes de Argentina y México, Alberto Fernández y Andrés Manuel López Obrador, anunciaron el 25 de mayo la finalización del proceso conjunto de fabricación de la vacuna de Oxford/AstraZeneca. Sin embargo, en las dos semanas transcurridas todavía no se pudo concretar ninguna llegada de vacunas porque AstraZeneca es muy estricto en los controles de calidad y no liberó las partidas. Las verificaciones no se hacen solamente en México sino también en Gran Bretaña y, además, hay un control externo denominado Quality Insurance, que también dictamina sobre cada muestra de vacunas.
Pese a las dificultades, todo indica que la semana próxima llegará a Ezeiza el primer envío de unas 800.000 dosis, en gran parte cedidas por México ya que a la Argentina le tocaba la mitad. Sería finalmente la concreción de una de las grandes estrategias del gobierno de Alberto Fernández: el acuerdo -Oxford/AstraZeneca-Argen-Mex.
China
Están firmados todos los papeles con Sinopharm para la provisión de seis millones de dosis, tal cual adelantó en exclusiva Página/12. La primera partida llegará el viernes 25 o el sábado 26 de junio y será de dos millones de dosis de la vacuna china. En el mes de julio vendrá el segundo envío de 4 millones de dosis.
Estos días también se firmó el acuerdo con Cansino, un laboratorio que se menciona como chino pero que en verdad tiene gran parte de su capital y su managment canandiense. La gran ventaja de esa vacuna es que es de una sola dosis y las pruebas se hicieron en la Argentina en la fundación Huesped, que lidera el doctor Pedro Cahn.
En total se está firmando un contrato -ya anunciado por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero- por cinco millones de dosis. Y, además, hay distritos como CABA y la Provincia de Buenos Aires que también se postulan para comprar. Todo indica que no habrá partidas antes de octubre, porque se requieren autorizaciones del estado chino. Es más sencillo para Sinopharm, que es estatal, que para Cansino.
Rusia
En Moscú se habla de un nuevo vuelo para traer vacunas. Sería durante la semana próxima y cumpliría con la periodicidad prometida por Vladimir Putin en dos discursos consecutivos. El Instituto Gamaleya y el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) efectivamente cumplieron con el envío del material para terminar la vacuna en la Argentina. El proceso se está trabajando en el laboratorio Richmond de Marcelo Figueiras. Según el empresario, se completarían 500.000 dosis 1 de Sputnik antes de fin de mes.
Con esta provisión de vacunas desde Estados Unidos, México, Rusia y la Argentina, se podrá mantener el ritmo de vacunación que este jueves superó las 375.000 dosis aplicadas en un solo día. El objetivo es vacunar a personas de 30 a 39 años antes de fin de mes.
Fuente: página12.com.ar – Raúl Kollmann