Francia suprime vuelos

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Son los de corta distancia y por el cambio climático.

Tal como se venía discutiendo desde abril, el Gobierno francés ha decidido eliminar los vuelos entre pares de ciudades que cuenten con servicio ferroviario y estén a menos de 2:30 horas de distancia. La decisión es uno de los primeros intentos por reducir la huella de carbono restringiendo la libertad de tránsito. Fuentes del gobierno galo dijeron que la medida está alineada con los objetivos de toda la Unión Europea.

Algunas de las rutas que resultarán afectadas por esta política de menos vuelos son París Orly – Nantes, y Lyon – Burdeos, pero podrían agregarse a la brevedad Lyon – Marsella, París Charles de Gaulle – Lyon y Rennes.

La supresión de vuelos se realizó en el marco de la Ley del Clima de 2021, una iniciativa que lideró la Convención de Ciudadanos sobre el Clima de Francia, que en los hechos es un grupo de activistas que dicen estar trabajando para encontrar una alternativa a las emisiones de carbono en el país.

La normativa que afectará a la aviación incluye cambios en el uso de aviones privados, especialmente los jets ejecutivos “para que el transporte sea más ecológico y justo para la población”, dice el texto de la norma.

Uno de los primeros en ir contra la aviación fue el ministro de Transporte francés Clement Beaune, quien dijo que no podía permitirse que las personas adineradas siguieran utilizando aviones privados para viajes cortos mientras el público reducía los vuelos de corta distancia para gestionar la crisis energética y el cambio climático. El ministro nada dijo sobre vuelos cuyo pasaje tiene un precio menor que realizar el trayecto en tren.

Al comenzarse a transitar en esta línea de pensamiento, y a concretarse su materialización en una ley o en el marco de una normativa ya aprobada, la Unión de Aeropuertos Franceses (UAF) y el Consejo Internacional de Aeropuertos (ACI Europa), se opusieron con firmeza, pero no lograron imponer un criterio más moderado.

Por el lado de los activistas, fue clara la satisfacción de organizaciones como Greenpeace. La directora de Campaña de Transporte de ese grupo dijo a Euronews que la decisión “va en la dirección correcta, sin embargo, esta medida inicial no es ambiciosa, sino que debemos ir aún más lejos”, aseguró la activista.

La supresión de vuelos sería por tres años, luego de los cuales se evaluará el resultado.

Entre los más activos actores en contra de las políticas restrictivas, está la European Business Aviation Association (EBAA), entidad que ha presentado una gran cantidad de información sobre lo que representa la aviación de negocios para Francia y Europa. La EBAA ha dicho que la aviación de negocios siempre ha sido pionera en la adopción de tecnologías innovadoras que mejoran la eficiencia de la aviación. “Desde 2009, la comunidad de la aviación comercial se ha comprometido a reducir el impacto ambiental de sus productos y operaciones a través de su compromiso climático. Ha estado a la vanguardia en la mitigación de su impacto sobre el cambio climático en muchos sentidos. Por ejemplo: en los últimos 15 años, las emisiones por hora, por vuelo y por avión comercial han disminuido en un 36 %. El sector de la aviación de negocios pasa por un ciclo continuo de diseño de fuselajes avanzados y tecnologías de sistemas de propulsión de vanguardia. La evolución constante de los productos impulsada por la investigación y el desarrollo demuestra por qué nuestro sector es el catalizador de la innovación en la aviación y líder en la descarbonización del sector de la aviación”, dijo la organización. Además agregó que la industria europea de la aviación de negocios emplea a casi 400.000 personas y aporta cerca de 90.000 millones de euros al PBI europeo anualmente.

Hay varios países dispuestos a seguir los pasos de Francia. En general los partidos socialistas están imponiendo su agenda en materia de aviación ya que consideran que viajar en avión privado es un lujo que afecta a la mayoría que no puede hacerlo.

Fuente: aeromarket.com.ar

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