En medio del conflicto por Aerolíneas Argentinas y en la antesala de la huelga de transporte, los pilotos denunciaron que el Gobierno busca quitarle la tutela gremial a sus dirigentes
El conflicto entre el Gobierno libertario de Javier Milei y los gremios aeronáuticos no cede. En medio de la amenaza de privatización que blande la gestión, el gremio que nuclea a los pilotos, la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), acusó a los funcionarios de querer disciplinaros.
En lo que catalogaron de «𝗚𝗿𝗮𝘃𝗶́𝘀𝗶𝗺𝗮 𝗣𝗲𝗿𝘀𝗲𝗰𝘂𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗮 𝗺𝗶𝗲𝗺𝗯𝗿𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗻𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗮 𝗖𝗼𝗺𝗶𝘀𝗶𝗼́𝗻 𝗗𝗶𝗿𝗲𝗰𝘁𝗶𝘃𝗮», los comandados por Pablo Biró señalaron que buscan sancionar a parte de la comisión directiva.
«En una muestra más de persecución sindical, informamos que miembros de la Comisión Directiva han recibido un telegrama colacionado por parte de Aerolíneas Argentinas, informando que se ha iniciado un proceso de exclusión de tutela sindical para que, en el caso de que la justicia decida hacer lugar al mismo, la empresa pueda sancionar a esos miembros de la Comisión Directiva», plantearon.
«Esto se transforma en una escandalosa persecución inédita a dirigentes sindicales que, en medio de un conflicto, se encuentran protegiendo y defendiendo los derechos de sus representados, lo que inexorablemente agrava la situación», añadieron.
«La empresa no solo se niega a negociar la actualización de nuestros salarios, sino que continúa en su campaña de represalias, todo incompatible con el marco legal vigente», remarcaron los pilotos que serán uno de los pilares de la huelga de transporte que este miércoles promete virtualmente paralizar el país.
«Seguiremos dando los pasos jurídicos y sindicales correspondientes», concluyeron.
Vale recordar que hace apenas unas semanas la misma APLA había conseguido un fallo de la Justicia Nacional del Trabajo que ordenó la reincorporación de tres pilotos de Aerolíneas Argentinas que habían sido despedidos en el contexto del conflicto laboral actual.
En aquella oportunidad lla jueza Stella Maris Vulcano dictaminó que los trabajadores deberán ser restituidos en sus puestos de trabajo en las mismas funciones que realizaban antes de su cese, al considerar que sus despidos fueron arbitrarios.