A 90 años de la creación de la CGT, refundada como Peronista a partir de mediados del siglo pasado

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Fue el 27 de septiembre de 1930 que dio a luz la Confederación General del Trabajo, producto de un acuerdo entre socialistas, sindicalistas revolucionarios, comunistas y sectores independientes, para confluir en la creación de una central “única y plural”, a la que no se sumaron los grupos anarquistas, de fuerte presencia en la lucha de esos años.

Argentina había comenzado a desarrollar una considerable estructura industrial. Y los sindicatos, primero organizados en sectores por rama y actividad, se conformaban con estructuras horizontales que de a poco mutaron en representaciones de funcionamiento vertical, a partir de la conformación de las conducciones elegidas por los trabajadores. Los gremios ferroviarios tenían mucho peso en aquellos años, pero fue un dirigente mercantil Ángel Borlenghi, quien se destacó cuando puso en marcha los primeros convenios laborales para la actividad del comercio y la creación del Estatuto del Peón.

Borlenghi sería luego un ministro central en el funcionamiento ejecutivo de la primera y segunda presidencia de Juan Domingo Perón, desempeñándose como Ministro de Interior y Justicia.

Pero previamente, durante la presidencia de Hipólito Irigoyen, la democracia vivía ya los primeros golpes cívicos-militares, que más allá de toda falencia de las autoridades políticas, siempre tuvo como objetivo, a través de una oligarquía dominante, evitar un proyecto de Nación con posibilidades de desarrollarse compitiendo con cualquier otro país del mundo en sus capacidades de crecimiento e inclusión.

Así también aparecen las primeras rupturas del propio Movimiento Obrero de aquellos años. Y ya en 1935 se produce la división en dos centrales sindicales, que continúan profundizándose hasta su refundación con la llegada del Coronel Perón al Ministerio de Seguridad Social y mucho más aún con la movilización del 17 de octubre de 1945 y la llegada del Peronismo al poder.

La CGT cuenta entre sus logros haber alcanzado convenios colectivos de trabajo ejemplo en toda la Latinoamérica y en gran parte del mundo, aunque carga con innumerables procesos de falta de unidad que han hecho mella en su fortaleza, hecho puesto mucho más aún en superficie a partir de la desvalorización que buscan imponer sectores del capital más afines a emprendimientos financieros que productivos, mientras se persigue el objetivo de flexibilizar los derechos laborales que hoy rigen las normas de empleo.

En este mismo sentido, en un pronunciamiento reciente realizado desde la histórica central de la calle Azopardo, se destacan “las continuas luchas encabezadas para el normal funcionamiento de las instituciones en el país, el regreso del ex presidente Perón del exilio, el ejercicio de la resistencia para poner fin de la proscripción del Peronismo y la cantidad de dirigentes y militantes que enfrentaron cada dictadura y que a partir de la instaurada en 1976 integran mayoritariamente la lista de detenidos desaparecidos”.

Al mismo tiempo que sigue fijando como objetivo la unidad para garantizar la Justicia Social. Y expresa la necesidad de enfrentar a “los poderes internos y externos que cíclicamente pujan por imponer corporativa y sistemáticamente un modelo neoliberal en perjuicio del interés nacional, destruyendo la industria y las fuentes de empleo en su búsqueda de flexibilizar las condiciones laborales de millones de argentinos”.

Ilustración: Daniel Santoro

Fuente: estadodealerta.com.ar

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