Catalogan como suicidio la muerte del trabajador succionado por un motor en el aeropuerto de San Antonio
La Oficina del Médico Forense del Condado de Bexar ha anunciado un impactante desarrollo en relación a un trágico incidente que ocurrió en el Aeropuerto Internacional de San Antonio el pasado viernes, donde un trabajador de tierra fue “ingerido” por un motor de un avión. El trabajador, David Renner, de 27 años, murió a causa de heridas contundentes y cortantes, y su muerte ha sido oficialmente categorizada como un suicidio, según reportó hace instantes CNN.
El macabro incidente se desarrolló alrededor de las 10:25 p.m., cuando el vuelo 1111 de Delta, que acababa de aterrizar desde Los Ángeles, estaba rodando hacia su puerta asignada utilizando un motor. Renner fue trágicamente succionado por el motor en funcionamiento, según un informe de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés).
La investigación en curso de este perturbador incidente está siendo manejada por la NTSB, que actualmente está recopilando más información. Las autoridades del Aeropuerto Internacional de San Antonio están colaborando activamente con la NTSB en su investigación.
Erin Rodriguez, portavoz del aeropuerto, declaró en un comunicado público: “Estamos profundamente entristecidos por este incidente, que resultó en la muerte de un miembro de la tripulación de tierra de una aerolínea el viernes por la noche. Estamos trabajando estrechamente con las autoridades mientras continúan su investigación.”
Renner era empleado de Unifi Aviation, una empresa que presta diversos servicios de aviación en el Aeropuerto Internacional de San Antonio. La empresa transmitió sus condolencias a la familia de Renner en un comunicado publicado por CNN y enfatizó su compromiso con el apoyo a su personal de tierra durante este desafiante momento.
Delta Air Lines también expresó un profundo dolor por la muerte de Renner, declarando a CNN: “Estamos desconsolados por la pérdida de un miembro de nuestra familia de la aviación en San Antonio. Nuestros corazones y todo nuestro apoyo están con su familia, amigos y seres queridos durante este difícil momento.”
Este trágico incidente en el Aeropuerto Internacional de San Antonio hace eco de un suceso igualmente devastador que tuvo lugar en la víspera de Año Nuevo del año anterior en el Aeropuerto Regional de Montgomery en Alabama, donde otro trabajador de tierra tuvo el mismo infortunado destino, según informó la NTSB.
Esta reciente clasificación de la muerte de Renner como un suicidio añade una nueva y trágica capa a la historia. La necesidad de medidas de seguridad integrales y apoyo a la salud mental para el personal de tierra de los aeropuertos nunca ha sido más evidente.
Fuente: www.aviacionline.com