El Gobierno celebró la renuncia de Pablo Moyano a la conducción de la CGT y destacó la “batalla cultural”
tn.com.ar
El líder camionero se alejó de la mesa chica de la central obrera por “diferencias” con los líderes de los diferentes gremios que la conforman.
El Gobierno celebró la renuncia de Pablo Moyano a la conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT) por “diferencias” con los líderes de diferentes gremios sobre el rumbo que debe tomar el sector ante la política económica nacional.
El primero en reaccionar fue Manuel Adorni, vocero de la Presidencia, quien se hizo eco de la noticia con la publicación de una placa televisiva y una réplica de su habitual latiguillo en las redes sociales. “Fin”, fue su mensaje en X.
También habló de la renuncia Javier Lanari, subsecretario de prensa de la Casa Rosada. “La batalla cultural se da los siete días, las 24 horas y en todos los ámbitos. Es la única manera de derrotar a la casta sindical analógica que impide el progreso del país”, afirmó un rato después de que se conociera la decisión del líder camionero. Ya durante la mañana del sábado, publicó en su perfil en X un “resumen de la semana” con noticias y datos de valoración positiva para el Gobierno e incluyó la renuncia de Moyano entre los ítems destacables.
El presidente Javier Milei, hasta la mañana del sábado, no había hecho comentarios sobre el tema.
Como informó TN, Moyano presentó su renuncia el viernes por la tarde a la conducción de la central obrera “al no coincidir con las decisiones tomadas por la llamada ‘mesa chica’”, según difundió en la carta de dimisión.
La decisión se conoció en medio de los cruces por los paros generales convocados por los gremialistas contra el Gobierno. Las tensiones entre los distintos sectores de la CGT volvieron a intensificarse esta semana, exponiendo una vez más la división entre el ala moderada, liderada por Héctor Daer, Andrés Rodríguez, Gerardo Martínez y José Luis Lingeri, y el sector más combativo, encabezado por Pablo Moyano junto a referentes del transporte y dirigentes alineados con el kirchnerismo.
El conflicto se profundizó tras la reunión de la mesa chica de la central sindical, realizada el martes en la sede de UPCN y a la que Moyano no asistió.
En ese encuentro, los moderados resolvieron dejar de lado cualquier convocatoria a medidas de fuerza al menos hasta 2025 y reforzar su estrategia de diálogo tripartito con el Gobierno y el sector empresario.
El secretario adjunto de Camioneros había confirmado que se estaba organizando “un paro nacional para diciembre” en rechazo a las políticas económicas del gobierno de Milei.
