Fabricaciones Militares: ATE advierte que Estados Unidos tiene la mira puesta en la empresa estatal de defensa de Río Tercero
El gremio de estatales ATE alertó sobre la posibilidad de participaciones externas en la empresa estatal de origen en el Departamento de Estado estadounidense. Apuntan a Río Tercero, la misma planta que voló por los aires en los 90′.
ATE señaló que la compañía estatal Fabricaciones Militares va a sufrir una nueva reestructuración de capitales con el posible ingreso de participantes extranjeros en la división metalmecánica.
La compañía podría convertirse en el camino en una Sociedad Anónima, no como en una privatización total sino en una empresa con capitales mixtos, alguno extranjero de peso que busca la producción de pólvora, municiones y armamentos para el Estado.
La versión surgió de la delegación de ATE Córdoba en Río Tercero, encabezada por Federico Giuliani, donde se encuentra una de las fábricas más grandes de Fabricaciones Militares y donde se produjo la histórica voladura de 1995. En esa sede, los representantes gremiales habrían sido notificados del cambio por parte de las autoridades de la compañía.
La introducción de capitales extranjeros se produciría a partir de septiembre, cuando se produzca el cambio jurídico societario. En principio, las entidades que tomarían control de la división señalada serían de origen estadounidense, con especial interés en las municiones.
«Desde ATE Córdoba expresamos nuestra preocupación ante la visita de una delegación del Departamento de Estado de Estados Unidos a la Fábrica Militar de Río Tercero«, declaró el gremialista a Agencia Sputnik.
Además, Giuliani rechazó la pasividad gremial y aseguró que no se puede “permitir que el Departamento de Estado de Estados Unidos haga pie en Córdoba, va en desmedro de esa soberanía y democracia que supimos construir. Ante esto estamos en alerta”.
Por otra parte, la compañía estatal cerró el ciclo de retiros voluntarios y recorte de personal. Según autoridades de la compañía, a los ofrecimientos se acogieron unos 240 empleados de los más de 1400 a nivel nacional. La nueva estructura que plantea el Estado es una de menor coste y mayor competitividad.