Jorge Sola encendió las alarmas: “quieren sindicatos debiles y empleados indefensos”

(15 de diciembre) El secretario general del Sindicato del Seguro y nuevo cotitular de la CGT, Jorge Sola, analizó el alcance de la reforma laboral impulsada por el Gobierno y alertó que las modificaciones proyectadas “atacan principios básicos de protección” y dejan al trabajador “más indefenso” frente al empleador.
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Según explicó, las medidas también afectan directamente a las instituciones sindicales que garantizan la representación colectiva. Sola aclaró primero qué implica la cuota sindical y cómo se define su pago.
Sobre ese plano, recordó que la afiliación es “una opción constitucional del trabajador” y que solo se descuenta la cuota cuando el empleado firma su ficha de afiliación. “Si no está afiliado, no se cobra. No es uniforme para todos”, subrayó.
En la actualidad, las empresas actúan como agentes de retención de esa cuota, que financia la tarea gremial. El dirigente explicó que esto es distinto a las contribuciones voluntarias que algunos gremios acuerdan en paritarias, y que no son de aplicación general. “Lo primero es entender que son figuras diferentes”, indicó.
Sola detalló que la cuota de afiliación suele estar entre el 1% y el 2% del salario, según cada sindicato. Ese aporte sostiene la representación en paritarias, los servicios gremiales y una serie de prestaciones que, en muchos casos, también reciben trabajadores no afiliados: turismo, salud, subsidios escolares y beneficios sociales.
El dirigente mencionó la llamada “teoría del free rider”, utilizada por sectores del Gobierno para justificar cambios. “Hay quien paga el boleto y quien se sube gratis al colectivo, pero recibe lo mismo. Ese es el argumento contra las contribuciones solidarias”, señaló. Sin embargo, remarcó que esas contribuciones no existen en todos los gremios.
La reforma plantea que las empresas “podrán” retener las cuotas, lo que, según Sola, desregula un mecanismo que hoy garantiza seguridad y previsibilidad. “La empresa queda liberada a decidir si retiene o no, siempre con aval del trabajador. Es un cambio que altera el sistema solidario y la estructura de financiamiento sindical”, advirtió.
El secretario general de la CGT insistió en que el proyecto oficial “ataca el principio protector y la progresividad” del derecho laboral. Desde su perspectiva, los cambios promueven relaciones individuales en detrimento de la negociación colectiva. “Se fomenta la relación mano a mano entre trabajador y empleador, lo que genera mayor indefensión”, sostuvo.
También alertó por la tentativa de fortalecer sindicatos por empresa en detrimento de los sindicatos por actividad, lo que debilita la representación. “Es ir a la baja del reconocimiento de la labor de cada laburante”, afirmó, al tiempo que reiteró que la reforma laboral impacta no solo en los derechos individuales, sino también en la estructura sindical que los sostiene.



