La región será la última en la que se normalicen los vuelos
15/05/2020 La Nación – Nota – Tema del Día – Pag. 12
Un informe advierte que América Latina tardará seis años en recuperar el nivel de viajes previo a la pandemia del coronavirus.
SAN PABLO.- América Latina será la última región del mundo que regresará a los niveles de viajes aéreos previos a la pandemia del nuevo coronavirus, lo que sería un fuerte revés para su débil industria del sector, según un reporte de la consultora ICF que será publicado ayer.
ICF predice que la industria aeronáutica de América Latina tardará seis años en recuperarse, mientras que las regiones de Estados Unidos, Canadá y Asia-Pacífico no tomarán más de cuatro. Europa, en tanto, necesitaría de cinco años y medio, de acuerdo con el reporte.
En general, la proyección es significativamente más pesimista que la presentada por la industria de las aerolíneas, al menos en público. Además advierte que la crisis de los viajes durará mucho más que el coronavirus en sí.
“Nunca hemos estado en un hoyo así de profundo”, dijo Carlos Ozores, consultor de ICF que trabaja con equipos de dirección de aerolíneas.
En comparación, un sondeo de la correduría Cowen publicado previamente esta semana sobre viajes de ejecutivos y analistas bursátiles mostró que el 62% de los consultados esperan que el transporte aéreo regrese a los niveles de 2019 en no más de tres años. Solo el 12% de los encuestados esperan que tome más de cuatro.
ICF, sin embargo, dice que lo peor está por venir y que el próximo año será el fondo de la crisis, con una demanda de pasajes que se hundirá un 62%. Esto obligará a las aerolíneas a reducir sus flotas y causará un efecto dominó en la economía.
“Esta es una caída en el tráfico y los ingresos que podría llevar a muchas aerolíneas a la bancarrota”, dijo Ozores. “Si tenés menos aviones, tenés menos pilotos, menos personal de cabina, y esos despidos serán permanentes”, advirtió.
La larga recuperación estimada por ICF pondrá un mayor estrés sobre las aerolíneas de América Latina, que ya se encontraban en una posición frágil. Avianca Holdings, de Colombia, solicitó la bancarrota el domingo pasado y sus rivales están rezando por un rescate.
Los viajes domésticos se recuperarán más rápido en todo el mundo, proyectó ICF. Eso podría ser una buena noticia para la fábrica brasileña Embraer, cuyos aviones de tamaño mediano han sido elogiados por su eficiencia en el consumo de combustible, pero sus ventas han sido bajas.
Por otra parte, la demanda por los aviones grandes para largas distancias de Boeing o Airbus se desvanecería por un tiempo más largo, ya que ICF estima que los viajes internacionales tomarán al menos un año más en recuperarse. Ambas compañías ya han anunciado decenas de miles de despidos.
Esa podría ser una oportunidad para que una aerolínea asuma riesgos y ordene aviones con precios bajos, de forma de recibirlos durante los años de la recuperación.
Delta Air Lines anunció ayer que está retirando toda su flota de aviones Boeing 777 como parte de las medidas de reducción de costos, mientras la industria de los viajes aéreos lucha por sobrevivir en medio de su peor crisis desde los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.
“Dado que se espera que el viaje internacional regrese lentamente, tomamos la difícil decisión de retirar permanentemente nuestra flota Boeing 777, 18 aviones, para fin de año”, indicó a su personal el CEO de Delta, Ed Bastian.
Agregó que la compañía con sede en Atlanta dependerá de los aviones A330 y A350-900, que son “eficientes y rentables”, fabricados por Airbus, el rival europeo de Boeing.
Delta acaba de informar su primera pérdida trimestral en cinco años y recibió 5400 millones de dólares en apoyo del Departamento del Tesoro norteamericano para mantener a flote la aerolínea. La compañía señaló el mes pasado que esperaba que los ingresos del segundo trimestre cayeran en un 90%, una cifra inédita.
Agencias Reuters y ANSA