Mientras el Gobierno analiza sacarle rutas, Flybondi lanza un nuevo vuelo doméstico
La low cost recibió la semana pasada una intimación del Gobierno para presentar un plan ante las reiteradas cancelaciones y suspensiones de sus vuelos. Ahora, la línea empezará a volar a un nuevo destino local.
La aerolínea low cost Flybondi está en el centro de la agenda. Es que, luego de recibir una intimación del Gobierno para crear un plan para corregir las reiteradas cancelaciones de sus vuelos, la autoridad de control local estaría analizando quitarle algunas rutas domésticas, para garantizar su correcto funcionamiento con los activos que posee.
Sin embargo, el gobierno de Santa Cruz anunció recientemente que firmó un acuerdo con la low cost para «mejorar la conectividad aérea de la provincia», de manera que Flybondi empezará a volar a Rio Gallegos el 3 de febrero del año próximo. La línea aérea de bajo costo operará seis vuelos semanales y este es su destino local número 20.
Según consignó Maurucio Sana, CEO de la compañía, esta ruta incrementará en un 45% en el número de pasajeros que visitan la región, a la vez que duplica las posibilidades de viajar en avión para los santacruceños. Es que, como suele suceder con algunas provincias, el único vuelo que conecta a Santa Cruz con la capital, lo opera la línea estatal, Aerolíneas Argentinas.
El vuelo de cabotaje entre Río Gallegos y el Aeropuerto Internacional de Ezeiza tiene una duración aproximada de tres horas y cuarto. La aerolínea puso a la venta los pasajes con descuentos a causa de la inauguración de la ruta. Los tickets promocionales son limitados y tienen un valor de $ 107.000 por tramo.
Flybondi, intimada a presentar un ‘plan de contingencia’
Esta noticia llegó luego de que la aerolínea recibiera un ultimátum por parte de la Secretaría de Transporte encabezada por Franco Mogetta para que, en un plazo no mayor a 48 horas, presente un plan detallado para mejorar la prestación de su servicio, gravemente afectado en noviembre por la poca disponibilidad de aeronaves.
El plan, según consignó la Secretaría de Transporte en un comunicado, debía contemplar una reducción significativa de las cancelaciones, así como también «la implementación de medidas de contingencia que garanticen la protección de los derechos de los pasajeros».
Es que, solo en noviembre, de los 1991 vuelos que operó la empresa, unos 384 sufrieron cancelaciones. Esto representa el 20% del total de las operaciones aéreas que realizó la compañía. Además, se estima que más de 700 vuelos fueron reprogramados.
Según pudo saber este medio, son varios los aviones de Flybondi que permanecen en tierra, inclusive uno de los recientemente incorporados de bandera lituana que la low cost alquiló para atender la demanda durante el verano.
Esto, consecuentemente, se traduce en demoras y cancelaciones, ya que las aerolíneas programan su oferta de vuelos dependiendo de la disponibilidad de las aeronaves. Y, si bien Flybondi hoy tiene 19 aviones, aproximadamente una docena están en tierra.
En este contexto, el organismo de control local (ANAC) estaría analizando quitarle algunas rutas a la low cost. No obstante, el primer paso, según indicó la semana pasada en el escrito que envió a la empresa, será una multa económica cuyo monto podría superar los $200 millones.
Antes del comienzo del verano y previendo una temporada de verano intensa, sobre todo, en viajes a Brasil, Flybondi se adelantó y sumó cuatro nuevos aviones -de forma temporal y sólo por el verano- a su flota.
Dos de ellos, de bandera lituana y los otros dos restantes, españoles. En ambos casos, los contratos se hicieron bajo la modalidad wet lease o ACMI, que implica que la aeronave se alquila con tripulación extranjera, servicio de mantenimiento y seguros.