Sturzenegger, el verdadero ministro: el arquitecto del ajuste que gobierna desde las sombras
enorsai.com.ar/Jueves 10 de julio de 2025 | 14:32
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Mientras Luis «Toto» Caputo corre de canal en canal para negar filtraciones, Federico Sturzenegger sonríe desde el corazón del poder. Esta semana fue homenajeado en Casa Rosada por ser, según palabras del propio Milei, el gran responsable de “la poda histórica del Estado argentino”. ¿Pero quién es realmente este economista de perfil tecnocrático? ¿Y por qué muchos lo señalan como el verdadero ministro de Economía?.
Federico Sturzenegger ex economista de Fernando de la Rúa, ex economista de Mauricio Macri y ahora economista en las sombras de Javier Milei. Sturzenegger, el verdadero ministro: el arquitecto del ajuste que gobierna desde las sombras
Un ajuste con nombre y apellido
Sturzenegger no tiene cargo formal, pero su firma aparece en cada decreto que recorta derechos. Fue el autor intelectual del DNU 70/2023, que eliminó regulaciones clave, desguazó organismos públicos y reescribió las reglas del juego económico. Lo que Caputo ejecuta, Sturzenegger lo diseña.
«Es el ministro sin cartera. El cerebro en las sombras. Caputo es un fusible, Sturzenegger es el proyecto», confesó a En Orsai un exfuncionario del Banco Central.
El propio Diego Giacomini lo sugirió en Radio 10: «Caputo ya cumplió su ciclo. Si hay reemplazo, el primer nombre que mira Milei es el de Sturzenegger «.
Del fracaso macrista al poder libertario
Para quienes siguen la política argentina, Sturzenegger no es un recién llegado. Fue presidente del Banco Central durante el gobierno de Mauricio Macri y uno de los artífices del endeudamiento con el FMI. Terminó eyectado en 2018, con una economía al borde del colapso.
Sin embargo, en 2024 volvió con fuerza. Su nuevo discurso: menos Estado, menos leyes, más mercado. Lo que antes vendía como “eficiencia estatal”, ahora lo rebautiza como “libertad económica”. En su paso de tecnócrata a ideólogo libertario, Sturzenegger se recicló como el guardián del ajuste eterno .
Decrecimiento programado
El plan es claro: achicar el Estado no para mejorarlo, sino para vaciarlo. Cierre de institutos científicos, despidos masivos, desregulación ambiental, privatización de tierras fiscales. Una reversión profunda del pacto democrático que sostenía al Estado como garantía de derechos.
El gabinete Milei se resquebraja
La puesta en escena entre Fantino, Caputo y Milei dejó en evidencia una interna feroz. Mientras Caputo es forzado a aclarar cada palabra, Sturzenegger gana protagonismo sin exponerse. Es el economista que no da entrevistas pero escribe decretos.
Y en los pasillos de Casa Rosada, todos lo saben: si cae Caputo, sube Sturzenegger. O Espert, su versión radicalizada.
Un cerebro que incomoda
Incluso figuras de la oposición temen su ascenso. «Tiene poder sin control. No responde a nadie. Y lo peor: tiene ideas claras y tiempo para ejecutarlas», admitió un senador peronista en reserva.
¿Un plan continental?
Las ideas de Sturzenegger no son solo locales. Viaja con frecuencia a foros internacionales, es invitado por think tanks conservadores de Estados Unidos, Chile y Colombia. Su proyecto de Estado mínimo y mercado absoluto ya circula en documentos regionales como un “modelo a exportar”.
«El ajuste argentino no es un error. Es un experimento. Y Sturzenegger es su director de laboratorio». Mientras el gobierno insiste con una “recuperación milagrosa”, la calle se hundi en recesión, desempleo y pobreza estructural. ¿Quién diseña ese país? ¿Quién se beneficia?. La respuesta es incómoda: no se llama Milei, ni Caputo. Se llama Federico Sturzenegger.
