Despidos y flota en tierra en S7, la mayor aerolínea privada rusa
SE AGRAVA LA CRISIS
Anuncia un recorte del 15% de su plantilla y dejará de operar con los aviones A320 y A321. El descenso de la demanda y la falta de repuestos siguen castigando a la aviación del país.
Despacio, pero la aviación rusa retrocede de forma constante. Según publica la prensa rusa, S7, la mayor aerolínea privada del país, ha anunciado el despido del quince por ciento de su plantilla al tiempo que dejará en tierra todos los aviones A320 y A321 de su flota. A una parte de su plantilla la invitará a seguir trabajando, si quieren, en las bases en el extremo este del país, en Irkutsk y Novosibirsk.
El problema que causa esta crisis tiene dos orígenes: por un lado, la guerra ha desatado una situación económica que es menos dinámica y ello se traduce en una reducción de la demanda. Los medios rusos hablan de que hoy hay un 18 por ciento menos de pasajeros que en 2019, el último año antes de la pandemia.
Por otro lado, la falta de repuestos ha convertido en más azaroso volar en el país. Según la prensa occidental, el número de fallos graves en aviones rusos se ha disparado y con ello la necesidad de aterrizajes de emergencia. En los ocho primeros días de diciembre hubo ocho fallos graves que provocaron la inquietud de los clientes.
