Acuerdo Milei-Macri: la reforma laboral esconde mecanismos para el traspaso del fuero laboral de Nación a CABA
Por Redacción EDA – 16 de diciembre de 2025 – Fuente/imagen
El proyecto de «modernización laboral» que impulsa el Gobierno nacional de Javier Milei oculta, en su largo articulado, una gran cantidad de elementos regresivos y peligrosos para el mundo del trabajo. Pero además de garantizar facilidades para el despido financiadas con fondos de los jubilados, fraccionar vacaciones y establecer un «banco de horas» para no pagar horas extra y todo otro conjunto de elementos que implican una histórica pérdida de derechos y beneficios para los trabajadores, el proyecto también incluye planes para una reforma regresiva de la Justicia laboral de la Ciudad de Buenos Aires, en un intercambio de favores entre la administración nacional y la del gobierno porteño de Jorge Macri.
En el marco de las negociaciones entre Nación y Ciudad por la exigencia del distrito gobernado por el PRO de que se salde en el Presupuesto 2026 una gran deuda de coparticipación acumulada, el proyecto de reforma laboral que el Gobierno busca aprobar antes de fin de año en sesiones extraordinarias en el Senado habilita la transferencia de competencias judiciales de Nación a Ciudad, en una modificación que la asociación de magistrados definió como un atentado contra el fuero laboral. El Gobierno nacional favorece el traspaso esperando una mayor receptividad de un fuero laboral porteño a iniciativas como los cambios antilaborales y antisindicales del DNU 70, que fueron considerados como «anticonstitucionales» por el fuero laboral nacional.
Entre los casi 200 artículos del proyecto oficial, ingresado la semana pasada al Parlamento, se avanza con la transferencia de una serie de competencias judiciales de Nación que aún le falta asumir a la jurisdicción porteña, de acuerdo a lo establecido por la reforma constitucional de 1994 que la definió como distritó autónomo. Como paso previo a la firma de un convenio específico, Nación incluyó el traspaso en el proyecto de reforma laboral, estableciendo que «la Justicia Nacional del Trabajo mantendrá su vigencia hasta tanto se instrumente el acuerdo de transferencia de competencias de la Justicia Nacional del Trabajo entre la Nación y el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires». Luego completa: «Una vez formalizado dicho acuerdo se dispondrán los actos necesarios para su progresiva disolución conforme las previsiones y plazos que surjan de dichos instrumentos».
la inclusión de esta aclaratoria en un proyecto tan general como el de la «modernización laboral» da claras señales de que el Ejecutivo nacional favorece el avance en este sentido, largamente reclamado por CABA, coincidiendo con la definición de la Justicia Laboral nacional como «anti empresas» y con fuerte influencia del kirchnerismo. La Ciudad ya venía dando pasos en este sentido desde el año pasado, cuando se aprobó la creación del nuevo fuero, integrado por diez juzgados de Primera Instancia del Trabajo y por la Cámara de Apelaciones. Lueo el Consejo de la Magistratura porteño instó a la Comisión de Selección de Jueces, Juezas e integrantes del Ministerio Público para comenzar con los concursos de magistrados, iniciativa que logró ser suspendida por una cautelar de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional (AMFJN).
El plan de traspaso recibió un importante apoyo de la Corte Suprema con el llamado «fallo Levinas» que reconoció la potestad del Tribunal Superior de Justicia porteño para resolver causas civiles, comerciales, laborales y penales de la justicia nacional ordinaria. En abril de este año, el presidente Milei también autorizó la creación de una comisión para avanzar con los planes de transferencia efectiva del fuero laboral a la Ciudad, que afirma estar en condiciones de asumirlo.
Pero tanto desde sectores del peronismo como de organizaciones de magistrados se considera que la iniciativa es regresiva, negando las supuestas afinidades del fuero laboral con el kirchnerismo y desmintiendo que sea una «justicia hostil» al empresariado, afirmando que sólo se trata de jueces «que hacen cumplir las leyes y la Constitución como la mayoría de los jueces». En este sentido denuncian que el traspado apunta a «crear un fuero ‘empresarial’ hostil con los trabajadores». La AMFJN denunció en comunicado su rechazo «categórico» al proyecto de reforma laboral, considerando «iniadmisibles» a los art´+iculos que impliquen «atentar contra la vida del fuero nacional citado» y exigieron que las momdificaciones se discutan «dentro de un marco de respeto a las instituciones que garantice la independencia judicial y el no avasallamiento de los fueros nacionales».
