Aerolíneas Argentinas suspende a 7500 trabajadores
Por la paralización de la actividad comercial forzada por el coronavirus
Las aerolíneas comerciales se han visto duramente afectadas en los últimos meses por el cierre de las fronteras que llevaron adelante numerosos países para tratar de frenar los contagios por coronavirus. En Argentina, las compañías deberán esperar el 1 de septiembre para retomar sus operaciones regulares desde, hacia o dentro de Argentina. Así lo definió la Administradora Nacional de la Aviación Civil (ANAC) a través de la resolución 144/20 que autorizó a reprogramar y comercializar pasajes con fecha de inicio ese mes, aunque la norma aclara que la fecha estará supeditada a la salida ordenada de la emergencia generada por el coronavirus. Esto significa que el regreso de los vuelos podría adelantarse o incluso postergarse. En el caso de Aerolíneas le empresa venía realizando solo vuelos de repatriación que estaban siendo coordinados por Cancillería.
«Los trabajadores que ingresen en esta modalidad de suspensión temporal, que estará vigente durante los meses de junio y julio, cobrarán una asignación no remunerativa junto con el aporte normal a la obra social, conforme a lo establece la normativa que rige el procedimiento al que nos estamos acogiendo», aseguraron desde la empresa. «En la mesa de negociaciones se va a discutir cuál es la suma no remunerativa que cobren los trabajadores suspendidos que van a ser solo los que no estén trabajando y la suma no remunerativa estará por arriba del 75 por ciento», aclararon, aunque el porcentaje definitivo aún no está definido.
La empresa interrumpió sus vuelos comerciales en marzo, pero pagó los salarios de marzo y abril. Además, se aclaró que el cuarto día hábil de junio estará depositado el salario de mayo. Sin embargo, se decidió avanzar con esta suspensión a partir de junio.
La empresa informó además que convocará a una mesa de trabajo a los representantes de las seis asociaciones sindicales que nuclean al personal de la compañía, a los fines de alcanzar un acuerdo que permita atravesar esta difícil situación, adecuando el funcionamiento de la organización al escenario actual y preservando, en la medida de las posibilidades, los intereses de los trabajadores y trabajadoras.
La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) emitió un comunicado el 17 de abril en el que instó a los gobiernos que consideren la adopción de medidas destinadas a morigerar la crisis. IATA estimó que este año los ingresos por pasajeros caerán en 314.000 millones de dólares, lo que representará un retroceso de 55 por ciento respecto a 2019. En un escenario de tres meses de restricciones severas, las pérdidas de ingresos serían de 252.0000 millones de dólares. Para las aerolíneas con sede en América Latina y El Caribe esto se traduce en una caída en los ingresos por pasajeros de 18.000 millones de dólares en 2020.