Avanza la privatización del primer paquete de empresas públicas

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10/10/2024 Infocielo.com (PBA) – Nota

Con un Decreto, el Gobierno Nacional dio otro paso hacia la privatización de empresas públicas dedicadas a la generación de energía eléctrica.

En medio del conflicto por la privatización de Aerolíneas Argentinas, el Gobierno Nacional avanzó en otro frente. Con un nuevo decreto, afinó el lápiz para poner a la venta de 4 empresas estatales dedicadas a la generación de energía eléctrica. Los detalles.

Se trata de las sociedades anónimas que manejan represas hidroeléctiricas y que hoy pertenecen a Energía Argentina SA y Nucleoeléctrica Argentina, pero están concesionadas. La idea del gobierno libertario, amparado por la Ley Bases, es vender estas sociedades anónimas (y también Nucleoeléctrica) en los próximos meses.

Este jueves salió el Decreto 895/24 en el Boletín Oficial. Ahí se facultó a la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, liderada por Diego Chaher, a llamar a concurso público nacional e internacional, competitivo y expeditivo para vender las acciones de cuatro represas hidroeléctricas: Alicurá, Chocón, Cerros Colorados y Piedra del Águila.

Como se dijo, esas represas ubicadas en Neuquén y Río Negro están concesionadas desde 1993. Los contratos vencieron en 2023, pero se vienen prorrogando desde entonces. Sin embargo, la idea del gobierno libertario es que esas prórrogas terminen en 2025 y que las represas pasen a manos de compañías privadas de manera definitiva.

Las internas libertarias en el medio
El organismo dirigido por Chaher será el encargado de impulsar lo que puede ser una de las primeras privatizaciones de la era Milei. Según la norma de hoy, deberá hacerlo en coordinación con la Secretaría de Energía que al igual que la Agencia en cuestión, depende del Ministerio de Economía de la Nación.

El último artículo del Decreto 895 derogó un decreto que había firmado Javier Milei en enero de este año. Ahí se establecía que la Jefatura de Gabinete de la Nación (ocupada por Nicolás Posse en ese momento) debía autorizar cualquier movimiento realizado por las sociedades del Estado. Ahora, esta oficina (ya con Guillermo Francos) quedó afuera de todo el proceso.

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