Canadá: esfuerzos públicos y privados por la electricidad en la aviación
Entes públicos, Pratt & Whitney Canada y De Havilland Aircraft of Canada Ltd. impulsan la tecnología eléctrica híbrida.
Con incentivos públicos e inversión privada surge otro proyecto que aspira integrar la electricidad a la aviación. Según informaron la empresas canadienses Pratt & Whitney Canada (P&WC) y De Havilland Aircraft of Canada, están trabajando para desarrollar una tecnología eléctrica híbrida que se probará en un avión Dash 8-100 de De Havilland. El proyecto cuenta también con la colaboración de Collins Aerospace, otra división del poderoso contratista Raytheon Technologies, que aportará el sistema de control avanzado de la aeronave de prueba.
Si bien para Pratt & Whitney Canada la investigación de nuevas tecnologías es parte de un plan de reinversión que alcanza los 500 millones de dólares canadienses anuales, esta tecnología verde está “apalancada” indirectamente por los contribuyentes que financian el plan de recuperación verde de Canadá y al Fondo de Innovación Estratégica del Gobierno de Canadá, que promueven este desarrollo con el objetivo de poner a la industria aeroespacial canadiense a la vanguardia de la aviación mundial sostenible.
Otra entidad pública que contribuye con el programa es Investissement Quebec, del gobierno de la provincia homónima. Como se recordará ese grupo inversor estatal fue parte activa en el financiamiento de Bombardier para desarrollar los aviones CSeries que finalmente se vendió a precio de oferta a Airbus, quien convirtió a la aeronave, ligeramente modificada, en la exitosa familia A220.
Volviendo al programa de las corporaciones industriales canadienses, lo que se procura es combinar dos tecnologías avanzadas que desarrollaron conjuntamente P&WC y Collins, que fueron presentadas en 2019, y serían la continuación del Proyecto 804 que sentó una base sólida para esta nueva iniciativa de propulsión híbrida. P&WC espera comenzar las pruebas en tierra el próximo año, lo que conducirá a las pruebas de vuelo en el demostrador Dash8-100 en 2024.
La tecnología de propulsión híbrida-eléctrica es parte central de la estrategia de transporte aéreo ecológico de Pratt & Whitney. La compañía también está comprometida con la mejora continua de la eficiencia de las turbinas de gas al participar en proyectos que promueven el uso creciente de combustibles de aviación sostenibles, para ello se ha enfocado en la industria de combustibles alternativos y una serie de tecnologías de nueva generación.
P&WC estima que todos los esfuerzos que se están realizando son esenciales para que el sector de la aviación cumpla los objetivos de reducción de emisiones de CO2 en 2050.
De Havilland Canada integrara la nueva tecnología de propulsión híbrida-eléctrica con sus baterías dentro de la estructura del avión Dash 8-100. Para ello diseñará una estructura de góndola modificada que albergue la novedosa tecnología. También será responsable del diseño e instalación de las interfaces de cabina que serán necesarias para supervisar y controlar de forma segura la tecnología híbrida-eléctrica. De Havilland Canada llevará a cabo el programa de demostración y prueba de vuelo, para lo cual estará en constante comunicación con Transport Canada, autoridad que autoriza las pruebas de vuelo experimental.
De Havilland Canada tiene un legado de innovación que ha prestigiado a la aviación de Canadá en todo el mundo a lo largo de más de 90 años.
La inversión de De Havilland Canada posiciona a la compañía como el primer fabricante de aviones regionales que colabora en el desarrollo de tecnología de propulsión híbrida-eléctrica y es una de varias iniciativas que reafirman el compromiso de la compañía de apoyar la “ecologización” de la aviación.