Martín Llaryora no acepta el trueque de Javier Milei: rechaza FADEA a cambio de la deuda de la Nación

Martín Llaryora aprieta los dientes porque el gobierno de Javier Milei no baja información concreta sobre cómo cancelará los $800 mil millones que el gobierno de Córdoba reclama. Sus alfiles aseguran que hay voluntad para que el oficialismo tenga su Presupuesto 2025, pero también avisan que no están dispuestos a pagos en especies.

El jefe de Gabinete, Guillermo Francos , deslizó la posibilidad hace unas semanas atrás con un ejemplo concreto. Sugirió que la Nación estaba dispuesta a ceder la Fábrica Militar de Aviones (FADEA), emplazada en la ciudad capital, como una forma de achicar el monto.
Este miércoles, fuentes oficiales del Panal admitieron a Letra P que quieren los recursos, ya sea en efectivo o con cancelaciones a través de bonos de deuda. Llaryora reclama por dos conceptos: la lista de 25 obras públicas que había preacordado con Francos hace algunos meses; más el pasivo con la Caja de Jubilaciones de la provincia que tiene un agravante: de enero a esta parte recibió cero pesos.

“FADEA se puede llegar a aceptar en una situación de salvataje extremo. Si el gobierno nacional la quiere cerrar, nosotros no podemos permitir que una fábrica radicada en Córdoba cierre sus puertas”, remarcan el carácter de excepción para avanzar en un plan canje.

La línea de equilibrio que busca Martín Llaryora
La postura cerrada se apuntala con recaudos. Llaryora hizo base en la ciudad de Buenos Aires para protagonizar un raid mediático mientras la Cámara de Diputados pulseaba por los límites a los decretos de necesidad y urgencia (DNU). Como contó Letra P, la mera posibilidad de modificar la legislación habilitó una ronda de 100 llamados y la ratificación de la voluntad negociadora con las administraciones provinciales.
Con la experiencia de la ley Bases a cuestas, el gobernador se encargó de explicitar el marco teórico de sus movimientos.

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Llaryora dejó dos conceptos centrales horas antes de que se conociera la condena a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner en el marco de la causa Vialidad: le pidió que dé un paso al costado en el PJ y la responsabilizó de levantar a Javier Milei en las encuestas, a quien anticipa como ganador en 2025.

¿Por qué un dirigente que se empecina en borrar las huellas del justicialismo en su mestizo Partido Cordobés habla del PJ a nivel nacional del que no forma parte? ¿Por qué augura un triunfo de Milei mientras vende el Modelo Córdoba como opción antigrieta?

El doble juego del bloque de Córdoba
Llaryora sabe que se vienen horas difíciles, en especial si el Gobierno avanza sin actualizar las partidas para las provincias . Necesita dejar en claro la desvinculación con el kirchnerismo y mostrar señales positivas al gobierno libertario en la puja por los fondos que se viene con las provincias. Apoyo, pero con contraprestaciones.

En el bloque Encuentro Federal, la bancada cordobesista entiende que la jugada en la Cámara de Diputados sirvió para “obligar al oficialismo a convocar al plenario de Presupuesto para su tratamiento”. En otras palabras, habrían forzado una ronda de diálogo con los gobernadores.

El cordobesismo quiere apoyar el Presupuesto, pero presiona para lograr los pedidos de pedidos de Martín Llaryora. “Si no se cumple, nos queda la carta para el próximo jueves”, adelantan el juego las espadas del gobernador. No se pueden agotar todos los cartuchos.

Diálogos cruzados con los alfiles de Javier Milei
Fuentes de Casa Rosada afirmaron a Letra P que no está previsto un encuentro entre Francos y Llaryora. En el Panal confirman, a su vez, que todavía no recibieron notificación alguna. Ya pasaron varios mandatarios provinciales, pero el cordobés aguarda ese mano a mano protocolar.

En el Panal no desesperan y aseguran que el propio Llaryora y su ministro de Economía, Guillermo Acosta , están en permanente contacto con los alfiles de Milei, mientras avanzan en la presentación del propio Presupuesto en la Legislatura. Sostenimiento de obra pública y la educación serán los ejes fuertes.

Más allá de los intercambios encumbrados, lo cierto es que, todavía, no hay plata y el gobierno cordobés se prepara para exprimir la autonomía cordobesista.