Patricia Bullrich inauguró una central sindical sin sindicatos
19/11/2021 Ambito Financiero – Nota – Política – Pag. 11
Mariano Martín
La apuesta de Patricia Bullrich de construir una central obrera alineada con el PRO debutó ayer con sólo dos dirigentes sindicales, uno de ellos antivacunas y al mando de una organización de farmacéuticos con personería en apenas tres distritos del país. El arranque, además, se caracterizó por una sucesión de cartas públicas de gremialistas que se desligaban de ese supuesto armado y afirmaban jamás haber participado.
La presentación de una Confederación de Trabajadores y Empleadores (CTE) contó con el protagonismo de Bullrich y de Marcelo Peretta, autoproclamado secretario general del sindicato de Farmacéuticos y Bioquímicos y de andar sinuoso por el ámbito gremial: de ser un inseparable del rural Gerónimo Venegas pasó a ser ruidoso ladero de Pablo Moyano y hasta se cobijó bajo el ala del gastronómico Luis Barrionuevo en su aventura como interventor del PJ durante el gobierno de Mauricio Macri.
Fue en esa gestión donde Peretta halló dónde apalancarse a falta de apoyos en el sindicalismo. De ahí que variara su discurso confrontativo de un lustro atrás por uno diametralmente opuesto, favorable a la flexibilización laboral.
A ese rasgo le sumó su condición de negacionista de la pandemia y una prédica contra la cuarentena.
Llegó a sugerir por televisión que la muerte del conductor Mauro Viale había tenido que ver con su vacunación unos días antes.
Ayer Bullrich y Peretta inauguraron oficinas de la CTE en Barrio Norte. El acto se destacó por las ausencias de gremialistas que en la previa habían sido mentados como parte del armado pero que rápidamente salieron a desmentirlo.
«Ante una fake news que no pienso promocionar que indica que Upsafip (personal superior de la AFIP) integra una agrupación sindical partidaria vuelvo a aclarar que de ninguna manera participamos ni en esa ni en ninguna agrupación sindical de carácter partidario», posteó en redes ayer el secretario general de ese sindicato, Julio Estévez. Por la noche el dirigente le ratificó a este diario: «Peretta es un gran vendedor de humo. Esa mesa sindical de Bullrich es toda una mentira».
Lo mismo sucedió con un sindicato del personal superior de las empresas de gas que había sido nombrado como parte de la CTE pero que rápidamente lo desmintió.
Ya en febrero pasado, cuando se informó por primera vez del armado de la supuesta central, también el sindicato de los Trabajadores de Control de Admisión y Permanencia (los «patovicas») desmintieron «rotundamente» su integración.
En aquella oportunidad la presentación inicial de ese sello había contado con la presencia de Miguel Pichetto.
Pese a la soledad Bullrich aprovechó el acto de ayer para exhibir como «algo revolucionario para la Argentina» una central alineada con el PRO y favorable a las reformas laborales que plantea ese partido. La exministra de Seguridad de Mauricio Macri también había sido titular de la cartera laboral en el gobierno de Fernando de la Rúa, una gestión en la que se destacó como defensora del recorte a jubilados y estatales, promotora de la presentación de declaraciones juradas de sindicalistas y gestora de un plan de ajuste con recortes en la entonces privada Aerolíneas Argentinas.
Peretta es recordado por varios de los dirigentes de la CGT. Víctor Carricarte, titular del gremio de empleados de farmacia, es uno de ellos.