LOS INVERSORES CASTIGAN AL GRUPO POR LA SITUACIÓN DE BRITISH Y AER LINGUS

En Gran Bretaña hay demasiado virus, lo que crea una situación que no invita a volar.

La semana empezó con un hundimiento de las bolsas. En general, las caídas oscilaron entre el uno y el dos por ciento. Pero IAG cayó un 5.2 sólo el lunes. El martes, cuando la mayor parte de los valores parecía recuperarse, IAG apenas subió marginalmente. Empezó la semana a 1.97 y el martes cerraba a 1,86, muy cerca del mínimo. Air France y Lufthansa cayeron el lunes, pero se recuperaron el martes.

¿Por qué los inversores no ven clara la situación de IAG?

En primer lugar, si miramos a largo plazo, IAG no ha perdido tanto como sus rivales. Pero si miramos a este mes, las cosas son diferentes.

IAG sufre fundamentalmente por British Airways y por Aer Lingus. Y sufre precisamente cuando en Gran Bretaña se normaliza la vida interior –aunque el virus sigue corriendo casi libremente. Y este es un problema: en Gran Bretaña hay demasiado virus, lo que crea una situación que no invita a volar, lo que afectará a la compañía.

Pero, además, esta crisis afecta a las llegadas de los ingleses a su país, donde se tienen que confinar, lo que les conduce a viajar menos. En la Europa central esto no se aplica en el caso de los vacunados.

Pero, además, la situación del virus empieza a empeorar en Estados Unidos, que es un mercado clave para British Airways y no tanto para las demás, lo que augura que habrá un retraso en la posible reanudación de los vuelos con normalidad.

Y este es un problema: en Gran Bretaña hay demasiado virus, lo que crea una situación que no invita a volar.

Pero hay algo más, fundamental: en unos días saldrán los resultados de la compañía con base en Heathrow y se espera ahora que sean peor que lo inicialmente previsto, lo cual está afectando a las ventas.