Vuela alto el déficit de Aerolíneas
27/07/2019 Página 12 – Nota – Economía – Pag. 2
El Gobierno estima para este año pérdidas por 10.973,5 millones
Cristian Carrillo
El principal objetivo de Cambiemos fue achicar gastos, pero la suba de combustibles y la competencia de las low cost complicó a la aerolínea.
Pese al plan de ajuste que implementó el gobierno en los últimos cuatro años en Aerolíneas Argentina y Austral, la dependencia de fondos públicos por parte de la compañía es cada vez mayor. Según el presupuesto de la línea de bandera, que publicó el Ministerio de Hacienda, este año tendrá pérdidas en distintos conceptos por un total de 10.973,5 millones de pesos, monto similar al que tuvo que desembolsar el Estado el año pasado (equivalente a 200 millones de dólares). El dato es una estimación que incluso podría empeorar en lo que resta del año. La resolución que aprueba el presupuesto de la aerolínea para este año, firmada por el ministro Nicolás Dujovne, se complementa con tres documentos: resultado operativo (con un déficit de 1652,3 millones de pesos), económico (con un desahorro de 4647 millones), y financiero (con un rojo de 4674,2 millones). “Para 2019 se prevé una operación en torno a los 350 vuelos diarios, lo que representa un 5 por ciento de crecimiento respecto de 2018, con un factor de ocupación promedio de alrededor del 79 por ciento”, describe el plan de acción de la empresa. La mejora se hará con una reducción de 153 empleos respecto de 2018.
Desde que asumió Cambiemos, la dirección de Aerolíneas se enfocó en reducir su déficit operativo para disminuir los aportes estatales a la línea de bandera. No se escatimaron esfuerzos en esa tarea y hubo reasignación de rutas, enfocándose sólo en destinos rentables –olvidando la idea de una conexión más federal–, se vendieron activos de la empresa y se tomó deuda en moneda extranjera para equilibrar las cuentas. Sin embargo, la constante devaluación de la moneda mantuvo la tendencia alcista del combustible, su principal costo operativo, y la creciente competencia de las low cost le fue quitando mercado. El gobierno buscó responsabilizar a los trabajadores por el costo laboral.
De hecho, en medio de la pelea por la situación del sector aerocomercial con algunos gremios, Hacienda publica el presupuesto 2019 de la empresa.
El titular de Aerolíneas, Luis Malvido, había adelantado que este año sería complejo en materia de financiamiento. “Va a ser peor que el año pasado, cuando necesitamos 200 millones de dólares de parte del Estado para seguir funcionando, todavía no sabemos cuánto. A nosotros cada mes nos está costando seguir el ritmo de pago a proveedores y sueldos. Se nos está haciendo cuesta arriba y necesitamos un enorme apoyo cada mes del Tesoro Nacional”, admitió el directivo. En 2018 la empresa acumuló pérdidas por 22.000 millones de pesos, mien- tras que en 2017 ese rojo había sido de 6600 millones. La hoja de ruta de la empresa reconoce un cambio en la situación del país “a partir del incremento del precio del combustible y el contexto económico, que atenuó el ciclo de mejora”. “No obstante, se prevé retomar ese ciclo a partir del segundo semestre de 2019”, señala la resolución de este viernes. En 2015 la pérdida neta había sido de 6487 millones de pesos.
“La rentabilidad ha ido mejorado sustantivamente al cabo de los últimos años producto de un mayor nivel de actividad y de un trabajo permanente en la búsqueda de eficiencia y reducción de costos”, insiste el informe. En el caso del resultado operativo, la resolución estima en 66.429,8 millones de pesos los ingresos y en 68.082,1 millones los gastos. El resultado económico se compone con ingresos corrientes de 66.429,8 millones de pesos y gastos por 71.076,8 millones. La empresa informa que actualmente cuenta con una flota de 82 aviones con una antigüedad promedio de aproximadamente siete años. Posee una red de vuelo con 37 destinos domésticos y 20 internacionales.
Entre los ajustes presupuestarios que continuará aplicando el gobierno se anticipan recortes de personal.
La planta permanente al cierre del año pasado era de 12.461 puestos, que pasarán a ser 12.308 este año, con un recorte de 153 empleos. En puestos jerárquicos no habrá cambios, pero en operarios se reducirá de 7027 a 6935 (92) empleos, y en administración de 2932 a 2873 (59). La empresa asegura que el recorte será el necesario “que permita alcanzar nuevos y mejores indicadores de productividad”.
Se prevé también la venta de activos de la compañía por 598,4 millones de pesos, la renovación total de deuda en moneda extranjera que se vence este año por el equivalente informado de 3334,9 millones de pesos. En salarios el presupuesto de la empresa prevé una partida de 19.318,8 millones de pesos, que se reparte casi en las mismas proporciones durante los cuatro trimestres del año.
Malvido adelantó la semana pasada que lanzará el mes próximo un servicio de courier pero a nivel de cabotaje, a través de una aplicación para teléfonos móviles, a la que comparó con las actuales Rappi y Glovo. El objetivo es aprovechar la capacidad ociosa en bodega para incrementar el servicio de transporte de paquetes, que hoy representa el 10 por ciento de ingresos de la compañía. Cabe recordar que el mayor espacio en bodega surge luego de la decisión de Aerolíneas y Austral de copiar el modelo low cost de cobrar servicios y extras al equipaje de mano en sus vuelos. No se prevén inversiones, más allá del mantenimiento de las unidades. “Las principales inversiones estarán orientadas a trabajos de mantenimiento de motores en los Embraer, derivados del ciclo propio de esa flota”, confirma el informe redactada por el subsecretario de Presupuesto, Agustín Bruno.
El dato del déficit es una estimación que incluso podría empeorar en lo que resta del año.
Luis Malvido había adelantado que este año sería complejo en materia de financiamiento. “Será peor que el año pasado.”