Advierten sobre posibles quiebras generalizadas en el sector aerocomercial
EMPRESAS DE TODOS LOS CONTINENTES ANUNCIAN MASIVOS RECORTES DE SU ACVTIVIDAD
Es el más golpeado por la pandemia. Las aerolíneas de EE.UU. piden un paquete de rescate de 50.000 millones de dólares. Las europeas también acuden a sus gobiernos. La crisis en la región.
Numerosas aerolíneas internacionales corren el riesgo de quebrar si, antes de que termine mayo, no se concreta una acción de rescate de distintos gobiernos nacionales ante la virtual paralización de sus operaciones impuesto por la pandemia del virus Covid-19.
Según el Centre for Aviation, una consultora de referencia internacional del sector, “para fin de mayo, la mayor parte de las aerolíneas en el mundo va a caer en bancarrota. Hace falta una acción coordinada entre los gobiernos y la industria para evitar una catástrofe”.
“Las reservas de efectivo (de las empresas) se están reduciendo rápidamente cuando las flotas permanecen en tierra y los vuelos que se siguen realizando operan a mucho menos que la mitad de su capacidad”, agregó el Centre for Aviation. “Muchas aerolíneas probablemente ya han caído en bancarrota técnica o, por lo menos, están al borde de incumplir con el pago de sus deudas”, dijo.
“De acuerdo con IATA, el cuerpo comercial de la industria, las pérdidas de ingresos ascenderán 113.000 millones de dólares debido a la crisis”, insistió la consultora.
El sector aerocomercial es el más afectado por las medidas restrictivas a los viajes impuestas por la mayoría de los países del mundo para limitar la expansión del coronavirus. En ese contexto, las malas noticias se multiplican.
Las compañías aéreas de Estados Unidos pidieron ayer a las autoridades una inyección sin precedentes de 25.000 millones de dólares y líneas de crédito por un monto equivalente, así como suspensión temporal de impuestos, señaló un comunicado de Airlines For America.
Cada compañía aérea del país suspendió miles de vuelos, aplazó la compra de nuevos aviones, anunció retiros voluntarios y congeló contrataciones.
Las empresas del sector tuvieron una rápida caída de liquidez en pocos días, explicó Airlines for America, que pide al Departamento del Tesoro ocuparse de ese segmento de la ayuda.
Además, este grupo de lobby pide que los créditos sean gestionados directamente por la Reserva Federal (Fed, banco central) y estén disponibles en 15 días.
En tanto, numerosas aerolíneas europeas -entre ellas Iberia, British Airways, Lufthansa y Air France, entre otras- decidieron ayer reducir drásticamente su actividad y pidieron medidas urgentes para evitar que el sector se desplome.
A causa de la pandemia, que llevó a muchos países a restringir los viajes y a pasajeros a anular sus vacaciones, la alemana Lufthansa anunció que reducirá su operación en el 90% de sus capacidad, mientras su filial Austrian Airlines suspendió todos sus vuelos desde el jueves y hasta el 28 de marzo.
“Se necesita una acción inmediata y decisiva”, alertó la británica Virgin Atlantic, al anunciar que se adaptará “a la demanda de los clientes”. “Dejaremos en tierra el 75% de nuestra flota a partir del 26 de marzo y en ocasiones en abril hasta un 85%”, subrayó.
Además, el grupo pidió al primer ministro británico, Boris Johnson, un plan de crédito de entre 5.000 y 7.500 millones de libras (5.500 a 8.230 millones de euros) “para impulsar la confianza en el sector y evitar que los gestores de tarjetas de crédito retengan los pagos de los clientes”.
En la misma línea, el International Airlines Group (IAG) -propietario de British Airways, Iberia y Vueling entre otras- planeó recortar su capacidad en “al menos 75%” en abril y mayo. Aunque aseguró tener “una liquidez sólida” y no desear un rescate público, dijo no poder dar previsiones sobre los beneficios para 2020 “a causa de la incertidumbre del impacto potencial y la duración del Covid-19”.
También el grupo formado por Air France y la holandesa KLM anunció que en los próximos dos meses reducirá entre 70% y 90% su oferta de asientos-kilómetro, unidad que sirve para calcular el numero de pasajes que ofrece una aerolínea.
Air France-KLM “seguirá vigilando la evolución del contexto diario para hacer evolucionar (su oferta) si es necesario”, afirmó el grupo.
La aerolínea francesa inmovilizará “el conjunto de su flota Airbus 380” y la holandesa “el conjunto de su flota Boeing 747”.
El grupo advirtió además de “una trayectoria financiera fuertemente degradada” respecto a los objetivos anunciados a finales de febrero.
La caída de su actividad solo se verá compensada “al 50% aproximadamente por la reducción de costos variables”, precisó.
Las low cost como la irlandesa Ryanair y la británica Easyjet están tomando provisiones similares.
Fuera de Europa, Air Canada reducirá en 50% respecto al año pasado su capacidad de transporte de pasajeros en el segundo trimestre debido a una baja en el tráfico y de sus ganancias, anunció ayer la compañía.
Por su parte, la chileno-brasileña LATAM, la mayor de América Latina, anunció una nueva reducción de sus operaciones, en un 70%, ante la menor demanda y las restricciones de viajes.
“Ante los nuevos anuncios de cierre de fronteras de diversos países y la consecuente caída en la demanda, LATAM Airlines Group SA y sus filiales informaron que reducirán su capacidad en un 70%”, señaló la firma en un comunicado.
El total se compone de 90% de “disminución de operación internacional y un 40% corresponde a vuelos domésticos”, añadió la empresa, que el jueves pasado anunció un primer recorte del 30% de su operatoria.
“Tomamos esta compleja determinación ante la imposibilidad de volar a gran parte de nuestros destinos por el cierre de fronteras. Si las restricciones de desplazamiento sin precedentes se amplían durante los próximos días, no descartamos vernos obligados a reducir aún más nuestras operaciones”, afirmó Roberto Alvo, actual vicepresidente comercial y próximo CEO.
En tierra. Austrian Airlines, filial de la alemana Lufthansa, dijo ayer que suspenderá todos sus vuelos hasta el 28 de marzo. La suya dista de ser una situación aislada en el sector aerocomercial.