En medio de la crisis, creció uno de los servicios más premium: los vuelos privados
Economía
David Cayón
El sector pudo seguir trabajando en cuarentena y fue la solución para empresarios de la industria, petroleros y de la minera. Además, sumó clientes y viajes de familias con altos ingresos.
El transporte en jet privado y helicóptero contó con más demanda Eran una de las opciones más elitistas para movilizarse y la pandemia los “popularizaron”. Casi sin vuelos comerciales durante varios meses, los servicios de taxis aéreos que supieron ser de uso casi exclusivo para ejecutivos de empresas crecieron en demanda en la Argentina. Uno de los puntos que lo hacía exclusivo es el costo. Para un vuelo de un avión de ocho personas que van y vuelven en el día, la cotización oscila entre los USD 6.500 y USD 7.500 (ida y vuelta). Un vuelo a Europa no baja de USD 250.000.
Sin embargo, fue un buen año para el sector. Los taxis aéreos tienen la particularidad que no son líneas de vuelo regulares, no emiten tickets ni tienen horarios de salida o de llegada regular a un destino, por lo que tenían cierta libertad para operar dentro de la pandemia y la cuarentena. En ese contexto, y sin vuelos regulares, comenzaron a volverse cada vez más y más atractivas. En un principio, según explicaron desde una empresa que prefirió el anonimato, “tuvimos mucha demanda de turistas extranjeros que habían quedado varados en la Argentina que pedían volver a Chile o a San Pablo, Brasil, porque de ahí tenían conexiones a sus países de origen”. En la capital del país trasandino había un vuelo diario a Miami y desde la ciudad brasileña se podía conectar con Europa. Llegó una segunda tanda que fue la de las empresas que necesitaban movilizar gente, como por ejemplo, la industria petrolera y la minera (OPI Santa Cruz) “Luego llegó una segunda tanda que fue la de las empresas que necesitaban movilizar gente, como por ejemplo, la industria petrolera y la minera”, explicaron desde la empresa. “Empezaron a contratar servicios para llevar y traer personal de un lugar a otro”. Un dato no menor es las estadísticas de vuelos del aeropuerto de Neuquén, la puerta de entrada a Vaca Muerta. Según publicó el diario La Mañana de Neuquén durante el primer semestre de 2020, entre Aerolíneas Argentinas y Austral manejaron 1.128 vuelos pero hubo otros 728 correspondieron a los aviones privados. “En este marco de desastre mundial somos unos afortunados porque fue el mejor año de nuestra historia. Tenemos pedidos y reservas para varios destinos”, explicó Miguel Livi, presidente y dueño de Royal Class.
“El punto del negocio a observar será en febrero y marzo de 2021 cuando entiendo que buena parte de la población podrá tener acceso a la vacuna. Ahí vamos a ver cuántos clientes vuelven al servicio convencional o se quedan en los vuelos privados”, dijo Miguel LiviLivi entiende que lo anormal fue el crecimiento que tuvieron durante este año por lo que destaca que “el punto del negocio a observar será en febrero y marzo de 2021 cuando entiendo que buena parte de la población podrá tener acceso a la vacuna. Ahí vamos a ver cuántos clientes vuelven al servicio convencional o se quedan en los vuelos privados”. Respecto al perfil de pasajero, Livi dijo a Infobae que “se mantiene el segmento ejecutivo, lo que sucede es que ahora se amplió a la familia del ejecutivo”.
En la misma línea opinó Lucía Sanz de Urquiza, gerenta comercial de Argentina Jets, una compañía de vuelos privados muy volcada al turismo de alta gama. “Nosotros tenemos una fuerte presencia en todo lo que es turismo, clientes que llegaban del, exterior, pero eso desde marzo y abril que trajimos a los últimos a Buenos Aires para que tomen vuelos de repatriados y regresen a sus países de origen ya casi que no tuvimos más clientes”. Sin embargo, la ejecutiva contó que con el turismo ausente empezaron a notar “un cambio de perfil” en sus clientes. “Aparecieron ejecutivos, personas de alto nivel adquisitivo que solían volar por compañías comerciales que empezaron a utilizar los taxis aéreo y compensó bastante la pérdida de los turistas, tanto es así que nunca paramos de volar”. El negocio de los aviones privados tiene varias particularidades. En el caso de la Argentina en su gran mayoría operan desde el Aeroparque Jorge Newvery, hoy cerrado por reformar, y desde la terminal aérea de San Fernando (Adrián Escandar) El negocio de los aviones privados tiene varias particularidades. En el caso de la Argentina en su gran mayoría operan desde el Aeroparque Jorge Newvery, hoy cerrado por reformas, y desde la terminal aérea de San Fernando. Y las aeronaves son de privados que se las “alquilan” a una empresa para que las utilicen como taxis aéreos.
Estados Unidos y los helicópteros. Una opción que también fue creciendo fue el uso de los helicópteros. Aunque son más costosos que los aviones privados, encontraron un mercado propicio para viajes cortos. “En plena pandemia, cuando no se podía circular, eran muy utilizados por aquellos que se movilizaban a, por ejemplo, estancias”. Otro cambio que sufrió el mercado que muchas aeronaves locales se fueron al mercado estadounidense en busca de mayores ingresos. Otro cambio que sufrió el mercado que muchas aeronaves locales se fueron al mercado estadounidense en busca de mayores ingresos“. Como operamos también en los Estados Unidos y ahí la demanda es más alta y más estable y hay argentinos que tienen un avión y que tenerlo en la Argentina les resultaba inútil o muy costoso y nos piden que lo llevemos y lo operemos en un mercado rentable como ese”, dijo el presidente de Royal Class.