“Tenemos que adoptar un sistema de test en los países de origen antes de volar para proceder a la reapertura de las fronteras”. Esta es la pretensión de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), que incide en que con la puesta en marcha de un modelo “eficaz” se “restauraría rápido el tráfico aéreo sin riesgo” (Heathrow marca el camino: test rápidos antes de viajar).

El lobby aéreo entiende que el gran escollo que impide la reactivación del transporte aéreo “no es la confianza de los pasajeros, sino las medidas de cuarentena que han tomado algunos gobiernos, de manera unilateral y desordenada”. “Eso es lo que bloquea el tráfico”, prosigue (Eurocontrol alerta de la evolución “dramática” del tráfico aéreo).

En una entrevista concedida a El Mundo, el director general y CEO de IATA, Alexandre de Juniac, avanza que “a finales de octubre podría estar listo” el mencionado sistema de test, “y luego empezar a desarrollarse progresivamente”. “Ese es al menos nuestro deseo”, aclara, reconociendo al mismo tiempo que se necesita que “la UE apruebe una recomendación para hacer este sistema de testeo”.

Lo que no está claro es quién pagará las pruebas. “Este es un punto que aún se está discutiendo. Nosotros reclamamos que sean los gobiernos los que asuman el coste, dado que han puesto las restricciones”, sostiene De Juniac, quien estima que “podría ser de unos 17 euros” por pasajero. “Pero este no es el problema real, sino que las autoridades lo acepten”, incide.

Fuente: preferente.com