FAdeA, ante los desafíos y oportunidades que ofrece el IA-100

La Fábrica Argentina de Aviones “Brigadier San Martín” tiene en el IA-100 uno de sus grandes desafíos en el mediano plazo, situación que también puede ser una puerta de entrada para diversas oportunidades de cara a una potencial comercialización regional.

Concebido para atender los requerimientos locales por un entrenador elemental/primario, el proyecto IA-100 ha enfrentado diversos desafíos, algunos de los cuales han tenido una lógica incidencia en los plazos previstos inicialmente, situación reconocida en FAdeA. Sin embargo, el programa sigue traccionando con el norte puesto en materializar una aeronave que tendrá como principales características una motorización de 260hp, tren retractil y aviónica digital certificados bajo normas FAR-23.

El IA-100 apunta a constituirse una solución para los futuros pilotos que deban realizar entrenamiento elemental (vuelo general) y entrenamiento primario/básico (vuelo primario, instrumental VFR/IFR, vuelo en formación, acrobacia, vuelo nocturno, navegación). En conjunto, el IA-100 deberá ofrecer las capacidades para una enseñanza eficaz y confiable, con una hora de vuelo promedio de U$D 185 dólares. Con el objetivo puesto en ofrecer un producto, FAdeA espera conformar e implementar un completo servicio post-venta, garantizando la operatividad a lo largo de su ciclo de vida; incluyendo un sistema de mantenimiento (MSG-3) y entrenamiento (ITS). Todo un desafío para la ex-Fábrica Militar de Aviones.

Avances y desafíos

Si bien la estructura del IA-100 es completamente de material compuesto, la principal innovación es que se utilizó la técnica de pre-impregando, lo cual implicó que FadeA tuviera que adquirir la capacidad en diseño en materiales compuestos de pre-impregnado, algo que en parte heredó y se adquirió con la experiencia de ser proveedor de Embraer y el C-390 Millenium.

Consultado sobre los alcances del IA-100 y lo que requirió su implementación, el jefe del programa destacó que se adquirieron módulos de software específicos, herramientas, capacitaciones para poder diseñar en pre-impregnado. “…Ha sido uno de los desafíos, lo que nos ha permitido a la fecha liberar más de la mitad (60%) del número de partes del desarrollo de avión…”.

Otro de los desafíos fue la fabricación de moldes de infusión de resina, algo que no se había realizado había realizado previamente. “…Se diseñaron, fabricaron moldes para las superficies más grandes, para caso de ala (cuatro), y se van a fabricar moldes de fuselaje. Es lo que venimos transitando hasta ahora…” comentó a Zona Militar el jefe de programa.

Algunos de los alcances destacados fue la fabricación del orden de 300 piezas del IA-100. “…Se avanza con las dificultades lógicas pero sobrellevando el desarrollo como tal…”, palabras que denotan que el proyecto presenta uno de los grandes desafíos para una Fábrica que en las últimas décadas viene sorteando el sinuoso camino propio de la industria de la defensa nacional, donde los proyectos a mediano y largo plazo deben superar las exigencias de mostrar resultados inmediatos. Situación en extremo compleja, sobretodo en el sector aeronáutico.

Pensando en lo que vendrá, los próximos hitos para el IA-100 son poder fabricar y ensamblar los conjuntos de empenaje horizontal y superficies móviles (timón de profundidad, dirección, alerón y flap) como corto plazo. La planificación también incluye poder finalizar los utilajes para fabricación de todas las partes del avión y poder finalizar la fabricación utilajes de armado. Una vez concluidas estas etapas, los esfuerzos se concentrarán en la fabricación del ala y después el fuselaje.

Expectativas

La apuesta en el IA-100 no solo apunta a satisfacer los requerimientos locales, sino que también busca poder hacerse de un espacio en el mercado regional, objetivo que no solo demandará contar con un producto con todas las letras, sino que también requerirá una estrategia global que incluye la participación de diversos actores locales que permitan posicionar y facilitar las condiciones para una venta.

De momento, la carta de interés rubricada con la Fuerza Aérea Paraguaya tiene su valor debido a que la intención con el IA-100 es trascender la demanda local y poder generar clientes externos aprovechando algunas de las características que dispondrá la aeronave tales como categoría FAR 23 acrobático y concepción en base a requerimiento militar.

Imágenes: FAdeA