Llaryora remarcó que, si Fadea no cambia, “esta es la triste salida”.

El gobernador recordó que había planteado una idea de reconversión, pero que fue “poco acompañada”. Los empleados siguen esperando cobrar el salario atrasado.
“Ustedes me han visto hablar de Fadea, lo hice hace un año y medio. Del tema hablé con los sectores industriales, di propuestas… Pero las tienen que escuchar”, dijo el gobernador Martín Llaryora en Buenos Aires, y se quejó: “Ha sido poco el acompañamiento que tuve”.
Según el gobernador, su planteo (imagina una fábrica que amplíe su producción y que incluya a los industriales de Córdoba y del país, con el gerenciamiento de un holding privado) no ha sido escuchado y las consecuencias (cierre por 72 horas, atrasos salariales, caída de contratos) están a la vista.
“Es poco el acompañamiento que he tenido. Sabemos que, si la situación no cambia, esta es la triste salida. Fadea es el corazón de la industria y en cualquier lugar del mundo eso andaría perfectamente”, sintetizó el mandatario.
En ese sentido, Llaryora enfatizó que Fadea es el único lugar del país en el que se reparan los aviones. “¿Dónde quieren hacerlo?», se preguntó en referencia al Ministerio de Defensa.
El gobernador cerró diciendo que espera que la Fuerza Aérea finalmente firme los contratos, algo de lo que depende el futuro de la fábrica.
Una de las situaciones más complejas de Fadea es la falta de fondos para pagarles a proveedores. Hay al menos 15 empresas de Córdoba que sufren el incumplimiento. El cálculo que se maneja en la fábrica de aviones, extraoficialmente, es que la deuda supera los 15 millones de dólares, y entre los proveedores hay desde pymes cordobesas y empresas del extranjero hasta un conocido restaurante que brinda el catering.
La Voz en Buenos Aires. Mientras, en Córdoba, el conflicto sigue. El próximo jueves al mediodía, el presidente de Fadea, Julio Manco, vendrá a la provincia para sentarse cara a cara con los responsables de los tres gremios que tiene la planta para darles una respuesta directa sobre el futuro inmediato.
Su visita fue confirmada por fuentes sindicales y del Gobierno, con una fuerte expectativa entre los empleados: que venga con el dinero para pagar lo que falta de los salarios de abril, y que dé alguna certeza hacia adelante.
La semana pasada, Fadea pagó un 30% de los sueldos y el viernes se depositaron 500 mil pesos al personal “no jerárquico”. El lunes, no hubo más novedades.
En medio de la incertidumbre y de las gestiones a nivel nacional, los rumores crecen y la protesta en la puerta de Fadea se mantiene, con empleados que pasaron la madrugada del martes haciendo vigilia para presionar a las autoridades y difundir el reclamo.
¿Qué rumores? Algunos empleados entienden que, desde el gobierno de Javier Milei, se busca el cierre de la planta. “A esta altura, no lo descartamos”, decía este miércoles uno de larga trayectoria en la fábrica.
Otra fuente, relacionada con la conducción, coincidió con la versión. “No nos mandan la plata, el expediente del pago sigue trabado en Economía, y (el ministro) Petri no atiende… Nos quieren cerrar”, expresó en estricto off.
Sin embargo, en el Gobierno niegan esa propuesta. Tanto en Córdoba como en la Nación no ven en el tablero esa posibilidad. Es más, creen que el dinero llegará en el corto plazo y que además habrá novedades sobre nuevos contratos para que la fábrica retome su actividad, con foco en la Fuerza Aérea.
De todas maneras, un posible traspaso de la Nación a la Provincia hoy no está discutido, según una alta fuente del gobierno de Llaryora.
Mientras tanto, dentro de la planta, las actividades son mínimas y están a cargo unos pocos administrativos, incluidos los gerentes.
El ingreso para los empleados está habilitado solo por si necesitan ir al baño. Ayer por la tarde, quedaban los restos de una choripaneada, un par de sillas y pasacalles colgados contra las vallas de ingreso. Esperaban buenas noticias.